Los padres y/o representantes deben cuidar la salud física y mental de los niños. Por lo tanto, se deben evitar situaciones que comprometan a los pequeños de la casa, recomienda la psicóloga Alyce Angarita.

Sugiere conservar las rutinas y horarios de levantarse y dormir, entendiendo que ambas situaciones son importantes para mantener su salud.

Deben los adultos ofrecer actividades diarias para seguir aprendiendo y desarrollando habilidades y capacidades –aseveró-, incluso en el período de vacaciones, procurando el disfrute.

Es bueno, que compagine con intereses como: lectura, escritura, lenguaje, música, artes plásticas y escénicas, deporte, meditación y contacto con la naturaleza, conservar la rutina de alimentación saludable, limitando el consumo de golosinas.

“Se debe disfrutar de la compañía de amigos y familiares mínimo una vez en la semana”, acotó la psicóloga.

Es necesario limitar y supervisar el uso de las redes sociales, incorporar al niño a la limpieza e higiene del hogar, ayudarlo a formar el hábito de ducharse y cepillarse los dientes, aspectos que forman parte del aseo personal.

“Lo más importante es ser afectuoso con los niños, ofrecer validación y soporte emocional, indagar en sus emociones y pensamientos inculcando los valores de amor y respeto, estando siempre los padres y representantes disponibles para ellos”, explicó.

No se debe olvidar-refirió- sembrar alegría, esperanza y confianza, aun cuando hay momentos difíciles, “podemos cuidarnos los unos con los otros con cariño y esto hace una gran diferencia”.

“El afecto, en situaciones incluso traumáticas ayuda a minimizar el impacto negativo en la salud mental”, explicó la psicóloga.

Es también importante tener presente el aspecto espiritual que profesen en la familia, por medio de la iglesia u otra actividad de conexión espiritual, como bendecir y agradecer por los alimentos, salud y familia, expresó.

Y por último, hay que cuidar de “nosotros, de nuestra paz y salud para poder dar ese apoyo que los niños tanto necesitan”. (Nancy Porras)