Freddy Omar Durán
El director y dramaturgo tachirense José Ramón Castillo la pasada semana abrió un paréntesis de la agitada agenda cultural que desarrolla en Brasil para desarrollar en San Cristóbal el proyecto teatral denominado “Arca”, cuyo éxito ha posibilitado una función más de la obra, este sábado 28 de septiembre en Bordes Café.
Además su visita permitió que el Ateneo del Táchira reabriera la cátedra de libre pensamiento José Antonio Guerrero Lossada, teniendo por tema central “El teatro y la frontera” donde el invitado especial estableció paralelismos entre lo que sucede en la ciudad Foz do Iguaçu, donde coinciden las fronteras de Argentina, Paraguay y Brasil.
Hace casi 8 años partió de San Cristóbal, dejando una larga trayectoria en el ámbito teatral desarrollada en la UNET y a través de su agrupación El Incinerador Teatro, gracias a una beca que le permitió cursar maestría; pero una vez finalizada la misma, muchos compromisos habían aparecido en su camino y determinaron una estadía de largo aliento en la cual ha venido impulsando su empresa cultural Entrefronteiras Companhia de Teatro.
De los montajes que ha realizado en Foz do Iguaçu, que ha contado con el apoyo de la alcaldía de un lugar muy marcado por el turismo atraído por las famosas Cataratas de Iguazú, recuerda especialmente el primero que trabajó con un elenco muy inclusivo.
“Yo hice un trabajo que se llama Las Ofelias, en el que trabajé con dos chicas travestis y una chica trans, algunas laborando en la calle, y comencé a meterme en la cuestión de los derechos humanos relacionados con el asunto de género. Vine a continuar lo que venía haciendo en derechos humanos como en México, que tratamos el tema de los desaparecidos. Y fue una aventura que te consume toda la energía, y luego viene mi espectáculo que yo le tengo muy consentido, “Vagamundo”, a partir de la información de viajantes que pasan por Foz do Iguaçu, trabajando el formato de calle”.
Sus montajes en gira han abarcado el sur de Brasil y son adaptables tanto para escenarios convencionales, como para los menos improbables.
“Con nuestro espectáculo estuvimos en el Festival de Curitiba y en Argentina, incluso lo he pensado llevar el próximo año para Colombia y Venezuela, para eso estamos a la espera de las invitaciones de agrupaciones de los dos países interesadas en el montaje. Son obras que hablan de qué es vivir en la frontera”.
A través de las Becas de Movilidad Artística del Ministerio de la Cultura de Brasil fue posible la residencia artista de Ramón Castillo en San Cristóbal para la dirección del montaje de “Arca”, en que se lucen los talentos actores de Michelle Rodríguez y Alexandra Valencia.
Como destaca en sus redes sociales la Fundación Bordes, “fue un viaje interno, un viaje de cuatro meses de conversaciones, búsqueda y exploración sobre la mujer, un viaje que nos llevó a descubrir, a sentir, a conectar. Arca no es solo una obra, es una experiencia, un viaje personal que nos lleva a reencontrarnos con nosotras mismas. Es un espacio donde la mujer se descubre, se reconoce y se celebra, pero también un sacar todo lo que está adentro que nos intoxica”.
“Nos quedamos sin asientos para las primeras funciones, lo que quiere decir que sí hay gente asidua al teatro en el Táchira. La gente quiere arte, y no para de buscar eso. Eso me hace fortalecer una línea de intercambio, entre los chicos acá y nosotros allá. Porque a pesar de que son temáticas similares las que tratamos allá y aquí, la visión, la poética, la manera de asumir las mismas son algo completamente diferentes. Todos mis amigos que han venido haciendo teatro, no han parado hasta ahora”.