Freddy Omar Durán
El Táchira ha perdido uno de sus pintores abstractos más destacados; pero aunque ya partió de este mundo, la gloria de su obra perdurará con nosotros.
Ha fallecido el señor Pablo Botero Ochoa, quien por muchos años puso también a prueba su talento en el mundo de la publicidad; pero ya en los más recientes años quiso retomar con más fuerza su pasión por la pintura, inclinándose a una tendencia informalista, a través de la cual se impone ante todo el impulso y el instinto creativo.
Como creador de la plástica se le recuerda por su estilo informalista que navegó por los principales centros expositivos de la región, como el Ateneo del Táchira y el Museo de Artes Visuales y del Espacio, ExtremeArt y la Galería Manuel Osorio Velasco.
Junto a Oswaldo León fundó Fundatualcance, a través de la cual se ha querido llamar la atención sobre el hecho artístico y la recuperación de espacios en los que pueden ser posibles darlo a conocer.
–Hay un momento en que la obra te dice deténgase, y a veces me ha ocurrido que me pase de color, de algo, y entonces no me gusta la obra y la he tapado. Cuando la ve, mis cuadros, puede decir que capta como un cementerio, o es un submarino sumergiéndose en el fondo del mar, o determinado animal. Cada quien ve una cosa diferente, se sujeta la imaginación de cada persona, e incluso potencia esa capacidad de espectador— diría alguna vez Botero en una entrevista brindada a Diario La Nación con motivo de una de sus exposiciones.