La torre de alta tensión que había sido reportada de gran riesgo por los habitantes de La Tinta, sector Villa Nueva, cayó sobre las líneas de alumbrado público de la referida comunidad del municipio San Cristóbal

Bleima Márquez

Momentos de pánico vivieron los habitantes de La Tinta, sector Villa Nueva, del municipio San Cristóbal, cuando una torre de alta tensión cayó la mañana de este viernes, 29 de noviembre, sobre las líneas del alumbrado público de esa comunidad.

Los vecinos habían notificado a los organismos competentes sobre el riesgo existente por deslizamientos del terreno, pero no acudieron a tiempo para evitar el colapso total de la inmensa estructura.

Al lugar llegaron funcionarios de Protección Civil y cuadrillas de trabajadores de Corpoelec. Movilizaron equipos y camiones para mitigar el riesgo, pero el movimiento de la tierra se mantiene activo dificultando las labores. Hacia las 3:00 de la tarde del mismo viernes, la estructura estaba sostenida por dos líneas de electricidad.  La tercera guaya colapsó debido a la inclinación.

 Los residentes del sector comentaron sobre la presunción de filtraciones provenientes de un tubo matriz de aguas blancas que pasa justo por donde está la enorme torre que cedió y que pone en peligro a toda la comunidad.

 “Gracias a Dios los viernes no hay clases, ni en la escuela, ni en el liceo”, exclamaron algunos padres de los niños, niñas, y adolescentes que estudian en la instalación educativa cerca de la torre afectada.

Hay temor de que, a pesar del esfuerzo de los trabajadores de Corpoelec, el transformador haya sufrido daños cuando la línea de alta tensión entró en contacto con la de consumo normal.

“Se escucha incertidumbre entre los enviados de Corpoelec con respecto a la forma de trabajo. Hay varias ideas, pero aún no se han materializado. Están esperando aprobación de sus superiores”, indicó un vecino a las 2:33 pm del viernes, y reiteró la preocupación de la comunidad por lo sucedido, y lo que pudiese ocurrir. Según los reportes, la zona estaba siendo despejada y no permitían a ningún vecino acercarse.