LA HISTORIA se repite, en el mundo entero, y en América Latina no se podía escapar… DURANTE el gobierno revolucionario de izquierda en Perú en 1968, todo el entramado empresarial de ese país fue estatizado y sus organizaciones entregadas a la clase sindical… AÑOS MÁS TARDE esta decisión del general Velasco Alvarado se mantuvo en parte por su sucesor en democracia Alan García, y fue definitivamente abandonada por el nuevo presidente Alberto Fujimori en 1990, quien revirtió la medida y permitió el crecimiento del aparato industrial declarado en quiebra para ese momento… SEGÚN RECIENTES declaraciones del presidente Nicolás Maduro, se acaba de encargar la privatización de unas 500 empresas nacionalizadas hasta ahora, al ministro de Industrias, Alex Saab, con lo que regresarían a manos de sus anteriores dueños, pues las mismas lejos de ser productivas actualmente, se habrían convertido en una carga insoportable por su incapacidad de crecer o producir como cuando estaban en manos privadas… SERÍA SALIR de un lastre ya convertido en una carga para el tesoro nacional, y devolver a sus anteriores dueños o futuros propietarios medio millar de estas organizaciones intervenidas ya sea a nivel bancario, siderúrgico, eléctrico, de fincas agrícolas y pecuarias, líneas aéreas, entre otras que estarían acusando pérdidas millonarias… ESTA MEDIDA anunciada para ponerse en práctica desde enero del año que nos alumbra, determinaría fortalecer el aparato productivo, originar un empleo de calidad y fomentar la riqueza del tesoro, conforme se logró en Perú durante la era de Fujimori, que hasta la fecha se sostiene y que ha hecho que ese país, aún convulsionado políticamente, mantenga la dureza monetaria de su sol frente al dólar a lo largo de más de tres décadas de implementación.

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Y ESTO, es todo por hoy.

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MENTIRAS universales:

“Estatizados, íbamos por el camino correcto”.

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DIOS los bendiga, ¿Saben?

VICTOR MATOS