Roma, ene (EFE).- El argentino Lautaro Martínez encarriló este domingo la victoria del Inter de Milán ante el Empoli (3-1) con un zapatazo desde fuera del área que relanzó a su equipo, perseguidor del Nápoles en una batalla por el ‘Scudetto’ en la que tiene todavía un partido menos jugado y 3 puntos de desventaja respecto al líder.
El Inter tenía la obligación de ganar. El empate de la pasada jornada ante el Bolonia y la gran victoria del Nápoles ante el Atalanta condicionaron sobremanera el duelo ante un Empoli que, en realidad, en ningún momento pudo tutear al campeón.
Porque el equipo de Simone Inzaghi dominó de principio a fin. Y con un Lautaro estelar que pudo además certificar numéricamente, con el gol, un gran partido. La estadística le era -y todavía le es- esquiva esta temporada. Los números no reflejan la importancia capital del capitán interista, que sumó su octavo gol en 19 partidos de la Serie A.
Lo intentó de todas las maneras antes de conseguirlo. Fue un monólogo ‘nerazzurro’ y un continuo peligro generado por Lautaro. Una chilena que obligó la reacción de Vasquez bajo palos, un disparo desde el corazón del área pequeña que se topó con un palo y un sinfín de ocasiones que no llegaron a buen puerto.
Tuvo el ‘Toro’ que alejarse de su zona favorita para, por fin, encontrar la merecida recompensa. No le costó mucho porque es un jugador también brillante en la construcción del juego, acostumbrado a desatascar salidas de su equipo. En esta ocasión se separó de sus marcadores hacia la zona de tres cuartos, recibió con espacio y, sin pensárselo, disparó desde la distancia para poner el balón en una escuadra con un golazo a la altura de su nivel en el minuto 55.
Abrió Lautaro el partido con esa diana que levantó a San Siro, ávido de una acción grande de su capitán para poder darle todo el cariño de nuevo. Y desde ese momento el Inter fue más incisivo arriba si cabe. Más eficaz en las jugadas de ataque, con cada vez menos toques para librar el entramado del Empoli.
Hasta que ya en los últimos compases, en el minuto 79, apareció un sospechoso habitual esta campaña para disipar dudas. Denzel Dumfries marcó su tercer gol en cuatro partidos con un testarazo en un saque de esquina. Asentado como titular, el carrilero derecho neerlandés está atravesando su mejor momento en el Inter.
Solo al final del choque, un ex como Sebastiano Esposito pudo encontrar una ocasión de recortar distancias. Se hizo hueco en el área y cruzó el disparo a un Sommer que no pudo hacer nada. Creyó durante unos momentos el Empoli, pero en una contra en el minuto 90 el Inter mató su esperanza. Le regaló Arnautovic el gol a Thuram, que solo tuvo que empujar el balón para poner el 3-1 final.
Lautaro abrió el marcador con un golazo que guió el camino a la victoria. Una fundamental para acercarse el Nápoles, para meter presión en la carrera por el ‘Scudetto’.
— Ficha técnica:
3 – Inter de Milán: Sommer; Pavard (Darmian, m.85), De Vrij, Carlos Augusto; Dumfries, Barella, Asllani, Zielinski (Mkhitaryan, m.69), Dimarco (Bastoni m.77); Taremi (Thuram, m.69), Lautaro (Arnautovic, m.78).
1 – Empoli: Vasquez; De Sciglio (Goglichidze, m.66), Ismaijli, Viti, Pezzella (Sambia, m.83); Gyasi, Grassi (Henderson, m.73), Maleh, Cacace (Zurkowski, m.83); Fazzini (Esposito, m.66); Colombo.
Goles: 1-0, m.55: Lautaro; 2-0, m.79: Dumfries; 2-1, m.84: Esposito; 3-1, m.89: Thuram.
Árbitro: E. Feliciani. Mostró tarjeta amarilla al entrenador D’Aversa, del Empoli.
Incidencias: encuentro correspondiente a la vigésima primera jornada de la Serie A disputado en el Estadio Giuseppe Meazza (San Siro) de Milán ante unos 80.000 espectadores. EFE