A ocho días de la guerra interna que se vive en el Catatumbo y que ha provocado el desplazamiento forzoso de al menos 36 mil civiles, 35 personas depusieron sus armas y se entregaron al Ejército de Colombia.

De acuerdo con el reporte de las autoridades, en la últimas horas seis personas bajaron sus armas para ser extraídos de la zona en conflicto y así ser sometidos a la justicia de su país.

Muchos de estos individuos son trasladados a la ciudad de Cúcuta, donde también se les brinda asistencia humanitaria destinada por el Gobierno para grupos al margen de la ley.

También ha habido extracción de menores que fueron entregados a Bienestar Familiar para el restablecimiento de sus derechos.

Hasta la mañana de este jueves, a la capital nortesantandereana ha arribado más 18.200 desplazados. Son atendidos en el estadio General Santander, allí se les da las ayudas que requieren y se trasladan a habitaciones de hoteles, coordinadas por la Alcaldía, o a la casa de algún familiar o amigo que indique el afectado.

Jonathan Maldonado