Nancy Porras
Muchas páginas escritas guarda la creación del seminario diocesano Santo Tomás de Aquino. Cumplir 100 años llena de satisfacción a la comunidad católica, no solo del Táchira sino de Venezuela, incluso del mundo católico.
“La primera experiencia de seminario fue el Colegio Seminario Sagrado Corazón de Jesús en La Grita, logro de monseñor Jesús Manuel Jáuregui”, evocó Pascual Mora, profesor emérito de la Universidad de Los Andes y presidente del Instituto de Estudios Humanísticos Nodo San Cristóbal.
Los sacerdotes se ordenaban en el seminario de Pamplona y en algunas islas del Caribe, entre ellas Curazao, porque para esa época, Guzmán Blanco había promulgado un decreto con el propósito de suprimir los seminarios, es decir, tenía impacto en el colegio Seminario Sagrado Corazón de Jesús, recordó.
“Monseñor Jáuregui los acompañaba en el proceso de formación en el seminario de La Grita y luego se los llevaba a lomo de mula a Pamplona”, resaltó.
Posteriormente se creó el seminario diocesano Santo Tomás de Aquino, por el primer obispo de San Cristóbal, monseñor Tomás Antonio Sanmiguel, etapa muy importante porque allí se comienza a consolidar ese proceso que luego va a continuar monseñor Rafael Arias Blanco, segundo obispo del Táchira, capituló el profesor Mora.
Luego se dio la creación, en la colina de Toico, del seminario diocesano, obra que específicamente va a desarrollar monseñor Alejandro Fernández Feo, destacó.
El dinero y los fondos fueron aportados por una fundación alemana, inversión de recursos que permitieron construir la estructura del Seminario Menor y luego paulatinamente el Seminario Mayor, expuso.
El profesor Pascual Mora es egresado del Seminario Menor, en 1980, y tuvo el honor de dar el discurso de orden por haber sido el primer alumno de la promoción.
No se ha desligado de esta institución. Aunque se marchó a fin de estudiar en la UCV, Filosofía, regresó y en 1986 se integra al equipo del Instituto Universitario Eclesiástico Santo Tomás de Aquino, obra del acuerdo que logran monseñor Fernández Feo, el padre Eduardo Fajardo Rueda y el entonces ministro de Educación, Rafael Fernández Jerez, quien lo eleva para darle ese sentido de universidad.
Allí emerge la facultad de Ciencias de la Religión de la Universidad Católica del Táchira, precisó.
“Se creó la licenciatura en Educación, mención Filosofía, logro que se concreta a fin de que los egresados del Seminario Mayor obtuvieran una licenciatura y así no enfrentaran inconvenientes al momento de dirigir los colegios católicos, ya que por Ley se necesitaba que fueran dirigidos por licenciados en Educación. Seguidamente se creó la licenciatura en Teología”, agregó.
Contó el profesor Pascual Mora que fue alumno de monseñor Hernán Sánchez Porras, su profesor de matemáticas; pero unos años después, monseñor Sánchez fue su alumno en Filosofía.