El presidente de la Fundación Arturo Uslar Pietri (FAUP), Antonio Ecarri, insistió este miércoles en que es necesario detener la hiperinflación en el país y dolarizar la economía como única medida para evitar que se acabe con la educación venezolana.

“Un maestro venezolano hoy está ganando seis dólares y probablemente la próxima semana sean tres dólares. Hay que detener en seco la hiperinflación, detener en seco el robo del poder adquisitivo de nuestros docentes y nosotros estamos planteando para eso, en virtud de esta situación tan grave, que se dolarice la economía venezolana, porque es la única manera de evitar que se termine de bajar la santamaria a la colapsada educación venezolana”, planteó Ecarri.

Estas declaraciones fueron ofrecidas en el marco de un acto en el que la fundación que encabeza firmó un acuerdo de cooperación con la Federación de Trabajadores del Magisterio de Educación (Fetramagisterio) en el que establecieron poner a funcionar en todas las sedes de los Sindicatos Únicos del Magisterio a nivel nacional una Casa del Lápiz, programa social bandera de FAUP.

Tras destacar que los maestros venezolanos están sometidos a una gravísima situación en Venezuela que ha traído consigo la liquidación del bolívar, el máximo representante de la Alianza del Lápiz indicó que no quedarán con los brazos cruzados.

“Junto a Fetramagisterio estamos abriendo Casas del Lápiz a nivel nacional, buscando brindar espacios a los educadores donde puedan refugiarse también en otros oficios y poder así compensar la terrible crisis económica que hoy los agobia”, agregó.

A propósito de la situación que atraviesa la educación venezolana, el dirigente político apuntó que además de niños con hambre en las escuelas, los maestros están desmayándose. Asimismo, precisó que persiste una fuga masiva que mantiene a siete millones de niños sin ser atendidos por el sistema educativo nacional, haciendo mención a los excluidos, los expulsados y a quienes estando matriculados tampoco están yendo por problemas de hambre.

En contraposición, Ecarri enfatizó que solo sustituyendo al bolívar como moneda oficial por divisas extranjeras se podrá garantizar prestaciones de los educadores, así como rescatar las infraestructuras escolares hoy totalmente en el suelo. En el mismo orden de ideas, destacó que al dolarizar se podrá garantizar el programa de alimentación escolar hoy prácticamente inexistente en los colegios de educación pública.