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Opinión
Impacto multidimensional: tres años sin aumento salarial venezolano
2 de marzo de 2025
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Pedro Morales
El presente artículo, que forma parte de un análisis cualitativo estructurado de la investigación a presentar en un próximo evento en la Universidad de los Andes (ULA) en la ciudad de Mérida, Venezuela, examina las profundas consecuencias de tres años sin aumento salarial en el país, explorando sus efectos más allá del ámbito meramente económico. El estudio, enmarcado en «tres ejes internos de desconexión nuclear», aborda cuatro dimensiones clave: axiológica, espiritual, cognitiva y emocional, revelando cómo la crisis salarial ha erosionado valores fundamentales, desafiado creencias arraigadas, alterado procesos de pensamiento y generado un malestar emocional generalizado. Este enfoque multidimensional, sustentado en una metodología rigurosa y sistemática, subraya la complejidad de la crisis y evidencia la necesidad imperante de soluciones holísticas que consideren no solo la precariedad económica, sino también la restauración del tejido social y el bienestar psicológico de la población venezolana.
1. Dimensión axiológica: la erosión de los valores fundamentales
La prolongada crisis salarial en Venezuela ha provocado una profunda erosión en el sistema de valores de los trabajadores y de la sociedad en general. Este fenómeno trasciende la mera preocupación económica, manifestándose como una crisis axiológica que desafía los fundamentos éticos y morales de la sociedad venezolana.
1.1 Desintegración del contrato social
La falta de aumentos salariales durante tres años representa una violación flagrante del contrato social implícito entre el Estado y sus ciudadanos. Este contrato, basado en la premisa de que el trabajo digno debe ser recompensado con un salario justo, se ha visto severamente comprometido. La erosión de este principio fundamental ha llevado a una crisis de confianza en las instituciones y en el sistema de gobierno, cuestionando la legitimidad de las estructuras sociales y económicas existentes.
1.2 Reconfiguración de la jerarquía de valores
La crisis económica que azota a Venezuela ha obligado a un sector significativo de trabajadores, quienes llevan tres años sin aumentos salariales y dependen de una renta fija en bolívares, a reconfigurar drásticamente su jerarquía de valores. Principios tradicionalmente considerados esenciales, como la honestidad, la solidaridad y la excelencia profesional y laboral, se ven amenazados por la apremiante necesidad de asegurar la supervivencia. Esta profunda alteración en la escala de prioridades no solo afecta a los individuos, sino que tiene graves repercusiones en el tejido moral de la sociedad venezolana. No obstante, este desplazamiento de los valores éticos tradicionales no implica un abandono total de los mismos, sino más bien una recontextualización dentro de una «ética de supervivencia».
1.3 crisis de la ética del trabajo
La desvalorización del trabajo, evidenciada por salarios que no cubren ni siquiera las necesidades básicas, ha provocado una crisis en la ética del trabajo. Los trabajadores, en promedio, se enfrentan a un dilema existencial: por un lado, el deseo de mantener su integridad profesional y ética laboral; por otro, la realidad aplastante de que su trabajo no les permite vivir dignamente. Esta disyuntiva genera una profunda disonancia cognitiva y emocional, llevando a cuestionar el valor intrínseco del trabajo y su papel en la construcción de una sociedad justa y próspera.
2. Dimensión espiritual: la búsqueda de sentido en la adversidad
La crisis salarial ha desencadenado una profunda crisis espiritual en numerosos trabajadores venezolanos, desafiando sus creencias más fundamentales y su sentido de propósito en la vida.
2.1 Crisis existencial y búsqueda de significado
La incapacidad de satisfacer las necesidades básicas a través del trabajo ha precipitado una crisis existencial generalizada. La clase trabajadora en su conjunto se enfrenta a preguntas fundamentales sobre el sentido de su existencia y el valor de su contribución a la sociedad. Esta búsqueda de significado en medio de la adversidad económica ha llevado a muchos a una profunda introspección y reevaluación de sus creencias y valores más arraigados.
2.2 Resiliencia espiritual y trascendencia
Paradójicamente, la crisis también ha despertado en una cantidad significativa de trabajadores una profunda resiliencia espiritual. Frente a la adversidad extrema, algunos han encontrado formas de trascender sus circunstancias materiales, buscando significado y propósito más allá de las recompensas económicas. Esta resiliencia se manifiesta en la persistencia de muchos trabajadores que continúan su labor a pesar de las condiciones adversas, motivados por un sentido de vocación y compromiso con el bien común.
2.3 Desafío a las creencias fundamentales
La prolongada crisis ha desafiado creencias fundamentales sobre la justicia, la equidad y el valor del esfuerzo personal. Un número no despreciable de trabajadoresexperimenta una profunda crisis de fe, no solo en términos religiosos, sino también en su confianza en el sistema social y económico. Este cuestionamiento de las creencias básicas sobre cómo funciona el mundo y el lugar del individuo en él ha llevado, en diversas ocasiones, a una reevaluación radical de los sistemas de creencias personales y colectivos.
3. Dimensión cognitiva: impactos en el pensamiento y la toma de decisiones
La crisis salarial prolongada ha tenido efectos significativos en los procesos cognitivos de un sector de los trabajadores, afectando su capacidad de pensamiento, planificación y toma de decisiones en diversas situaciones.
3.1 Deterioro de las funciones ejecutivas
El estrés crónico asociado con la inseguridad financiera de ciertos trabajadores ha demostrado tener un impacto negativo en las funciones ejecutivas del cerebro. Esto se manifiesta en dificultades para la planificación a largo plazo, la resolución de problemas complejos y la toma de decisiones estratégicas en estos casos. Varios trabajadores, constantemente preocupados por la supervivencia inmediata, llegan a experimentar una reducción en su capacidad para pensar de manera abstracta y considerar las consecuencias a largo plazo de sus acciones.
3.2 Sesgo del presente y toma de decisiones a corto plazo
La precariedad económica extrema ha exacerbado el sesgo del presente en la toma de decisiones. Algunos trabajadores, enfrentados a necesidades inmediatas apremiantes, tienden a priorizar soluciones a corto plazo, incluso cuando estas pueden ser perjudiciales a largo plazo. Este fenómeno se observa en decisiones como abandonar estudios o carreras profesionales en busca de ingresos inmediatos, o en la adopción de estrategias de supervivencia que pueden comprometer el bienestar futuro.
3.3 Impacto en la creatividad y la innovación
La constante preocupación por la subsistencia básica ha tenido un efecto inhibidor en la creatividad y la capacidad de innovación de un grupo de trabajadores. La teoría de la escasez cognitiva sugiere que la preocupación constante por la escasez de recursos consume capacidad mental, dejando menos espacio para el pensamiento creativo y la resolución innovadora de problemas. Esto tiene implicaciones profundas para el desarrollo personal y profesional, así como para la capacidad de la sociedad para abordar desafíos complejos y generar soluciones creativas
4. Dimensión emocional y sentimental: el costo afectivo de la crisis
En términos generales, la prolongada crisis salarial ha tenido un impacto devastador en el bienestar emocional y sentimental de los trabajadores venezolanos, generando una compleja red de respuestas afectivas y alterando las dinámicas interpersonales
4.1 Ansiedad crónica y depresión generalizada
La incertidumbre económica persistente ha generado un estado de ansiedad crónica entre algunos trabajadores. Esta ansiedad se manifiesta en preocupaciones constantes sobre la capacidad de cubrir necesidades básicas, lo que a su vez conduce a patrones de pensamiento en ciertos casos rumitativos y catastrofistas. La sensación de impotencia frente a la situación económica ha llevado a algunos a estados de depresión clínica, caracterizados por sentimientos de desesperanza, apatía y pérdida de interés en actividades anteriormente gratificantes.
4.2 Erosión de la autoestima y la identidad personal
La incapacidad de algunos de proveer adecuadamente para sí mismos y sus familias ha provocado una erosión significativa de la autoestima de estos trabajadores. La identidad personal, a menudo estrechamente vinculada a la profesión y la capacidad de ser autosuficiente, se ve severamente cuestionada en estos casos. Este deterioro de la autoimagen tiene ramificaciones profundas, afectando las relaciones interpersonales, la motivación laboral y la salud mental general de quienes lo experimentan.
4.3 Alteración de las dinámicas familiares y sociales
La tensión económica ha tenido un impacto significativo en las relaciones familiares y sociales. Se observa un aumento en los conflictos intrafamiliares, exacerbados por la frustración y el estrés económico. Paradójicamente, también se ha observado en algunos casos un fortalecimiento de los lazos familiares y comunitarios, como mecanismo de supervivencia colectiva frente a la adversidad. Sin embargo, la incapacidad de participar plenamente en la vida social debido a limitaciones económicas ha llevado a muchos trabajadores a experimentar aislamiento social y alienación.
4.4 Culpa y vergüenza: el peso emocional del «fracaso» percibido
Numerosos trabajadores experimentan sentimientos profundos de culpa y vergüenza, internalizando la narrativa del «fracaso personal» a pesar de las circunstancias sistémicas que han llevado a la crisis. Estos sentimientos son particularmente agudos entre profesionales y académicos que han invertido años en su formación y carrera, solo para encontrarse incapaces de mantener un nivel de vida digno. La vergüenza asociada con la pobreza y la dependencia económica puede llevar a comportamientos de aislamiento y retraimiento social, exacerbando aún más los problemas de salud mental.
A manera de conclusión reflexiva:
Hacia una comprensión y abordaje integral de la crisis salarial venezolana
El análisis del impacto de tres años sin aumento salarial en Venezuela revela una crisis que trasciende lo económico, afectando la integridad humana. Esta situación ha erosionado valores y desafiado la resiliencia espiritual, cognitiva y emocional de los trabajadores. Se requiere un enfoque holístico de recuperación que integre principios espirituales y prácticos, fundamentado en una economía de la salvación y la búsqueda de felicidad verdadera. Este enfoque enfatiza cualidades como humildad, fe y caridad, fortaleciendo la resiliencia individual y promoviendo la reconexión comunitaria. Así, se busca reconstruir el tejido social fracturado, abordando las dimensiones axiológica, espiritual, cognitiva y emocional afectadas
La transformación interior y la sabiduría colectiva emergen como pilares fundamentales para abordar la crisis existencial y la búsqueda de significado identificadas en la dimensión espiritual. Las prácticas contemplativas y la búsqueda de discernimiento se proponen como medios para fortalecer la resiliencia espiritual y trascender las circunstancias materiales adversas. Estas prácticas no solo responden al desafío de las creencias fundamentales discutido anteriormente, sino que también ofrecen herramientas para mejorar la capacidad de planificación y toma de decisiones a largo plazo, contrarrestando los efectos del estrés crónico en las habilidades cognitivas señalados en el análisis. La promoción de valores como la paz interior, la paciencia inquebrantable y la bondad desinteresada busca crear un ambiente que nutra no solo el alma, sino también la mente, fomentando la creatividad y la innovación, también afectadas por la crisis.
Para abordar la desconexión en los aspectos axiológico, espiritual, cognitivo y emocional detallados a lo largo del análisis, se propone un camino de sanación integral basado en el amor verdadero, la oración constante y la humildad sincera. Este enfoque holístico reconoce la interconexión entre las diferentes dimensiones afectadas por la crisis y busca una recuperación que restaure la dignidad y el propósito de los trabajadores venezolanos. La práctica devocional profunda, la consagración sincera y la participación en los sacramentos se presentan como medios poderosos para fortalecer la conexión con lo divino y entre los seres humanos, complementando las estrategias de recuperación psicológica y social discutidas previamente.
Este proceso de transformación personal y colectiva aspira a crear un ambiente que no solo aborde las necesidades económicas inmediatas, sino que también promueva la salud mental, el bienestar emocional y la renovación espiritual, conduciendo así a una verdadera economía de la salvación y la felicidad duradera. En última instancia, este enfoque integral ofrece un camino hacia la reconstrucción no solo de la economía, sino del tejido social y espiritual de la nación venezolana.
¡Al final, el Inmaculado Corazón de la Virgen María triunfará!
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Profesor Titular ULA-UNET. Proyecto educativo: “Salve María Auxiliadora, economía de la salvación y de la felicidad verdadera”. ostulante a Rector de la Universidad Nacional Experimental del Táchira. (UNET) [email protected] / WhatsApp +58 416 8735028
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