El caos se apoderó de los alrededores de las estaciones de servicio en el municipio San Cristóbal y otras comunidades del estado Táchira, puesto que las colas para acceder al combustible ahora son en caracol y de doble fila, por más de ocho cuadras, lo que implica unas seis y hasta ocho horas para cumplir el objetivo.
Hasta dormir en los vehículos les toca a los tachirenses, si quieren contar con el combustible. La situación se agudizó con algunos brotes de desórdenes en las mismas estaciones de servicio, donde ya se han registrado lesionados por las protestas de quienes hacen la cola y ven, despavoridos, cómo hay una cola de privilegiados, que entran de retroceso, a la vista de dueños y operarios de gasolineras, e incluso con la presencia de cuerpos de seguridad.
La ciudad de San Cristóbal se vio este martes envuelta en una anarquía total en cada sector donde había una estación de servicio abierta. Al parecer, la situación ha ido empeorando, porque no llega suficiente combustible al estado y la mayoría de las gasolineras están cerradas.
“El vergonzoso negocio”
Los comentarios son generalizados por parte de los conductores, quienes afirman que al parecer dueños de estaciones de servicio y personal administrativo y operarios, así como los mismos funcionarios de seguridad que cuidan, están involucrados en un “vergonzoso negocio del retroceso”, al permitir una cola paralela de vehículos que, sin estar dos, tres, cuatro o cinco horas en el lugar, pagan y pueden surtir sin inconveniente el combustible.
—Solo esperan unos minutos, pagan y de retroceso se abastecen, mientras nosotros aquí hasta tenemos que amanecer -señaló José del Carmen Arrieta-.
No hay vocería oficial
Ante tanto desorden vehicular que se ha presentado en los últimos días, se intentó buscar personal autorizado para que se pronunciara sobre el particular, pero ninguna de las fuentes consultadas quiso explicar las razones por las cuales la mayoría de las estaciones de servicio este martes estuvieron cerradas, lo que trajo como consecuencia un caos agudizado en las estaciones de servicio, de mal en peor.
(AM)