Regional
Se recuerdan los años dorados de la Billo´s
lunes 15 septiembre, 2025
Víctor Matos
El domingo 31 de agosto de 2025, el mundo del espectáculo venezolano se quedó dormido y pocos fueron los que recordaron que en esa misma fecha, ocho décadas y media atrás, en 1940, el país despertaba alegre bajo el ritmo de una gran agrupación orquestal: La Billo´s Caracas Boys.
Este grupo surgió de la obra, genio y figura del gran músico dominicano Luis María Billo Frómeta, que convirtió a la agrupación como la más popular del país. Frase que le sirvió de eslogan. Sí, fue ese 31 de agosto cuando la música bailable puso a vibrar primero a toda Caracas, y luego a la geografía patria, para alcanzar niveles internacionales sin paralelo a lo largo de su existencia.
Llenó de orgullo patrio el equipo musical, al ganar en 1987, junto con la cantante cubana Celia Cruz, el Récord Guinness con el concierto más grande al aire libre, registrado en la celebración de los carnavales en la ciudad de Tenerife, en donde más de doscientas cincuenta mil almas danzaron al ritmo de esta orquesta congregada en la Plaza de España del archipiélago ibérico.
Luego de su formación, la orquesta Billo´s fue toda una revelación a través de los programas de radio de la época, como A gozar muchachos, Fiesta fabulosa, Esta noche Billo´s, Compre la Orquesta, La Revista de Billo´s, que duraron hasta principios de los años 50 bajo la animación de Musiú Lacavalerie, Emilita Dago, Henry Altuve y Paula Bellini.
La gente canturreaba por las calles y en las fiestas temas emblemáticos como: Apágame la vela, La vaca vieja, Epa Isidoro, Pasito tun tun, Pa´Maracaibo me voy, Se va el caimán, Tren de seis, Playa brisa y mar, Al paso, Magallanes será campeón, Año Nuevo, que les abrieron el telón a decenas de composiciones del maestro que amó a Caracas con todo su corazón.
Tras su inesperado fallecimiento, cuando se le iba a rendir un gran homenaje por su brillante trayectoria, la empresa que formó, desarrolló e impuso en la querencia del pueblo, empezó a tener problemas con sus herederos, y a aparecer grupos musicales abrogándose el nombre de Billo´s que permanecieron por varios años en el ambiente de la farándula, hasta que recientemente fue reconocida una sola por decisión judicial, para continuar con la memoria del extraordinario músico que contó en su equipo con figuras vocales como las de Manolo Monterrey, Víctor Piñero, Rafa Galindo, Víctor Pérez, Felipe Pirela, José Luis Rodríguez, y los que brillaron como estrellas bailables como Cheo García, Memo Morales, Ely Méndez, el más longevo en la agrupación, medio siglo sobre las tarimas y quienes jamás saldrán de la memoria de un pueblo que sigue bailando con la inigualable Billo´s Caracas Boys.
Luis María Billo Frómeta dejó este mundo físico el 5 de mayo de 1988 cuando se preparaba para dirigir la Orquesta Sinfónica de Venezuela, tras un fulminante paro cardíaco que se lo llevó a la eternidad, en donde estamos seguros, sigue brillando.
Billo Frómeta, el amigo permanente de la Feria
“Cuando un extranjero hace de Venezuela su patria y ennoblece con su arte el país, se debe a que el pueblo mismo le ha abierto su tierra y colocado el alma nacional a sus pies”.
Así glosa su homenaje al maestro de la música tropical, Luis María Billo Frómeta, el escritor David Caifman, en donde describe su vida y éxitos en homenaje a este gran hombre que hizo de Venezuela su lar adoptivo y al que le cantó durante toda su existencia.
Al frente de su orquesta, la Billo´s Caracas Boys, estuvo en casi todos los episodios bailables de nuestra Feria Internacional de San Sebastián, sobre todo en los famosos “mano a mano” que enfrentaba su estilo a la de la Orquesta Los Melódicos de Renato Capriles y que mantuvieron esa rivalidad musical por décadas.
Aquí, se granjeó el maestro Billos el respeto, el cariño y la admiración que él brindó a raudales a esta ciudad capital, San Cristóbal, en donde reinó en casetas, clubes y hoteles, demostrando su calidad directiva y su amor por el Táchira en donde aún se le recuerda con el cariño que supo ganarse como caballero y animador de los grandes encuentros bailables.
Víctor Matos