Nacional
Sin reactivos para detectar VIH y sífilis en sangre donada de hospitales en Caracas
25 de abril de 2018
En febrero de este año, Geraldine Labrador gastó 15 millones de bolívares para evaluar las seis bolsas de sangre que necesitaba transfundirse su hijo. Tuvo que asistir a un centro privado y pagar la serología para descartar la presencia de enfermedades como hepatitis C, virus de inmunodeficiencia humana -VIH-, o sífilis en las donaciones.
Su hijo tiene leucemia y es atendido en el hospital de niños J.M. de los Ríos, pero en el centro de salud no había sangre lista para transfundir, narró el portal Efecto Cocuyo.
La crisis de reactivos serológicos persiste en el Banco Municipal de Sangre, ente encargado de distribuir hemoderivados a gran parte de los hospitales de la capital, entre ellos el J.M. de los Ríos.
Los otros seis centros de salud que dependen del banco son: el hospital José María Vargas, el hospital de Lídice, la maternidad Concepción Palacios, el hospital de Coche, el hospital Dr. Francisco Rísquez y el de Los Magallanes, de Catia.
En las instalaciones del Banco Municipal está la sangre, pero faltan los reactivos para hacer el despistaje del VIH y la bacteria de la sífilis. Sin estos, no se puede suministrar el tejido a las unidades de los centros de salud.
En otros nosocomios que no dependen del Banco Municipal la escasez de reactivos es aún mayor. En el Clínico Universitario no solo faltan los insumos para hacer estas dos serologías, sino también la necesaria para descartar la presencia de Hepatitis C.
“En Caracas faltan los reactivos para el VIH y el VDRL (prueba serológica para la sífilis). El Banco Municipal está parado y los demás bancos de sangre están intercambiando los reactivos para completar los que les faltan”, explicó a Efecto Cocuyo Maribel Meléndez, secretaria general de la Sociedad Venezolana de Hematología (SVH) e integrante del Grupo Cooperativo de Medicina Transfusional.
El último lote de reactivos que el Estado trajo al país llegó a finales de febrero y, según denunció la SVH para ese momento, la cantidad era insuficiente para abastecer a todos los centros de la red pública y alcanzaba para un período de un mes y medio, aproximadamente.
La llegada de estos insumos fue anunciada por el presidente Nicolás Maduro el pasado 30 de enero, cuando informó sobre la inversión de 12.3 millones de euros para la adquisición de hemoderivados, reactivos y otros insumos médicos para dotar a los hospitales.
“No han llegado más insumos. Tenemos los mismos que trajeron de China y han aliviado la escasez en Caracas porque no enviaron las mismas cantidades a los hospitales del interior”, apuntó Meléndez.
Realizar las pruebas serológicas en los centros privados, al igual que hizo Geraldine Labrador, se ha convertido en algo normal para los pacientes, quienes han asumido los costos de otro procedimiento que anteriormente era garantizado en la red pública.
A mediados de enero, la Sociedad Venezolana de Hematología y el Grupo Cooperativo de Medicina Transfusional alertaron sobre las escasez de reactivos para detectar la presencia de hepatitis B, hepatitis C, VIH/sida, sífilis, el virus linfotrópico humano y el mal de Chagas en las donaciones de sangre.
Ambas organizaciones advirtieron que los bancos de sangre estaban en riesgo de quedar inoperativos por la falta de insumos y señalaron que desde julio de 2017 las unidades han reportado fallas en la dotación de reactivos.
“El Estado venezolano como garante de la salud debe proveer los insumos y reactivos de óptima calidad y en cantidad suficiente para la operatividad oportuna y adecuada de los bancos de sangre del país”, insistieron ambas organizaciones.