(AFP) El exespía cubano de la CIA, Luis Posada Carriles, quien falleció este miércoles en Estados Unidos a los 90 años, era acusado por Cuba y Venezuela por atentados terroristas y considerado por La Habana como el hombre que durante años urdió planes para matar a Fidel Castro. Cuba lo responsabilizó por la voladura de un avión comercial de Cubana que había despegado de Barbados en 1976, dejando 73 muertos. Fue encarcelado en Venezuela, pero escapó en 1985 y eventualmente se instaló en el sur de Florida. La Habana también le atribuyó una larga serie de actos “terroristas”, incluidos ataques con bombas a hoteles en la capital cubana en 1997 en los que murió un turista italiano. Sin embargo, el militante anticastrista nunca fue juzgado por esos actos en Estados Unidos, donde residió hasta el fin de sus días. (AFP)