Luz Adriana Ramírez Pérez, madre de tres niñas de 10, 8 y 2 años de edad busca poner una contradenuncia al ciudadano Omar Alexander Guerrero Cano quien anteriormente era su pareja.

“Ninguna de mis 3 hijas, son hijas de ese señor. El fue mi pareja durante un largo tiempo, pero vivir con él solo trajo hambre y maltrato, a mí y a mis 3 hijas”, afirmó Ramírez.
Cabe destacar que Omar Guerrero expresó que en la casa de oración o refugio de Capacho “sus hijas pasaban hambre y se le negaba la comunicación de él con ellas”, a lo que Ramírez Pérez contestó que “todo es mentira ya que el solo me maltrataba física y psicológicamente y en varias oportunidades me corrió de la casa donde hacia vida con él y sus tres hijas y ahora aclaro ante todos que no tengo ningún lazo sanguíneo con este hombre”.

“Que deje de preocuparse por mis hijas, que no son de él, que se preocupe por los hijos que tiene que por algo sus exparejas no se los dejan ver”, exclamó Ramírez.
La mujer informó que consiguió un apoyo, una mano amiga, en la casa de oración de Capacho: “recibo las tres comidas al día, para mí y mis hijas; tengo un techo y una cama cómoda donde descansar con mis hijas, además de la tranquilidad de no ser golpeada ni corrida de este lugar” concluyó.
(Jennifer Prisco/ Pasante UBA)