Con una procesión junto a la reliquia de primer grado -un fragmento del cuerpo- de la beata Madre Carmen Rendiles, desde la entrada del Seminario Diocesano Santo Tomás de Aquino hasta la capilla Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote, se dio inicio este viernes 22 de junio, a la semana en homenaje a la nueva Beata venezolana.
En este homenaje participaron las congregaciones religiosas que hacen vida en la Diócesis de San Cristóbal, así como laicos comprometidos de los diversos grupos de apostolado, seminaristas, sacerdotes y amigos del seminario.
La Eucaristía solemne fue presidida por monseñor Mario Moronta quien recordó que todos estamos llamados a ser santos, citado la exhortación apostólica Gaudete et Exultate del papa Francisco.
El obispo también resaltó las virtudes de Madre Carmen, especialmente “la sabiduría y sencillez de la religiosa, cuya sabiduría le vino de parte de Dios en la abnegación a Jesús Hostia”.
Así mismo recordó su experiencia con Madre Carmen, a quien conoció siendo seminarista, recordando con especial cariño la sonrisa con la que permanecía la religiosa: “una sonrisa que proviene del amor de Dios”.
Exhortó a los feligreses a recordar con especial afecto, la entrega y el valor que tenía Madre Carmen al sacerdocio: “cosa que nos hace falta”, insistió el obispo.
En la ceremonia también administró el Sacramento de la Confirmación y Primera Comunión algunos semanistas, a quienes invitó a tener como modelo a la Beata.
Con el inicio de la semana de homenajes, la Reliquia de la Beata Carmen reposará en la Capilla del Seminario Diocesano del 22 al 30 de junio. Informó el comité organizador que las Eucaristías se realizarán a las 5:30 pm, y la actividad de clausura se efectuará en la Casa de Retiros El Sembrador en la comunidad de Patiecitos.