“El tema del aborto no puede caer en la diatriba política. No es ni de izquierdas ni de derechas. Es un atentado contra un ser totalmente vulnerable y con su dignidad de imagen y semejanza de Dios”, aseveró el obispo de San Cristóbal, Mario Moronta, en una nota pastoral para ser leída este domingo en cada eucaristía en las comunidades de la Diócesis.
En estos días algunos grupos sociales han introducido ante la Asamblea Nacional Constituyente la solicitud de que se estudie la aprobación del aborto. Los argumentos que se esgrimen suelen ser los mismos de otros lugares.
“Movidos por nuestra fidelidad al Dios de la vida y en conciencia los cristianos católicos debemos oponernos a esta solicitud y manifestarlo públicamente. El aborto no es un derecho humano como tampoco es una manera de defender a los más pobres”, advierte el pastor diocesano.
Aunque generalmente se cargan las tintas contra la mujer que aborta, el obispo amplía que los médicos, enfermeros y todos los que realizan esta “criminal praxis” así como quienes ejercen presión sobre la madre para abortar “son tanto o hasta más responsables de un vil asesinato”. Por eso, también ellos cometen un gravísimo pecado, agrega.
“Dado el inminente peligro de que en nuestra patria se apruebe la despenalización del aborto -lo que vendría a acrecentar la inmensa cantidad de problemas que atentan contra la dignidad humana en la crisis que sufrimos- es necesario no sólo estar prevenidos sino hacernos eco fuerte del rechazo a esta posibilidad”, expresa Moronta. “Todos hemos de expresar por los medios a nuestro alcance el total rechazo al aborto y nuestro sí a la vida en todas sus expresiones”.
El obispo pide a médicos, abogados y maestros, comunicadores sociales y enfermeros, dirigentes políticos y sociales que, de acuerdo a su fe y como miembros de la Iglesia, se pronuncien contundentemente sobre el tema. (DP)