La gobernadora del estado Táchira, Laidy Gómez, rechazó la propuesta del Ejecutivo nacional respecto al plan de regulación de gasolina que será implementado en el país a través del Carnet de la Patria, el censo automotor y la amenaza de que deben pagarla a precios elevados a quienes no se dobleguen ante el chantaje.
Destacó mediante una nota de prensa que los tachirenses deben dormir hasta por dos días en las colas para poder surtir de combustible aunado a la exposición a la inseguridad que la precaria situación les obliga, por lo que este nuevo intento del Gobierno nacional no traerá nada positivo.
“Es la peor estrategia que se pudo haber tomado para mitigar el negocio del contrabando de combustible en los estados fronterizos, ya que ninguna de las decisiones tomadas en la materia ha podido frenar este flagelo; y por el contrario se ha visto como la ilegalidad del contrabando se ha convertido en el negocio de unos pocos, por lo que el carnet de la patria y el censo automotor lo harán quienes vivan del negocio de la gasolina”, refutó Gómez.
A propósito de su visita al municipio Libertador en el marco de una jornada de atención médico social, la gobernadora del estado resaltó que esta jurisdicción no escapa de las largas colas que azotan a las estaciones de servicio de la zona; así mismo expresó que en las bombas hay un colapso entre quienes se dedican al contrabando y quienes necesitan abastecer sus vehículos de gasolina para movilizarse a sus actividades diarias.
“Los ciudadanos de bien que producen y trabajan para alimentar las mesas de los venezolanos en el Táchira no pueden ser amenazados, reitero que esto es una burla a la integridad”, expresó.
Finalmente exigió de manera reiterada atención de las condiciones básicas de vida para los ciudadanos de la entidad; pues considera que por ser un estado fronterizo los problemas de afectación social se duplican.
Esto en referencia a servicios básicos como la energía eléctrica, el gas y las telecomunicaciones que se ven mermados en las poblaciones rurales donde están los productores del estado que deberían ser los mejor atendidos por la calidad de trabajo que realizan en favor del país.