De una semana a otra los precios del pan se han trepado a montos que pocos bolsillos pueden aguantar.

Aún no los trabajadores no han recibido el primer pago del aumento decretado vía Presidente de la República y ya el pan les tomó la delantera, y lo más probable es que eso no se quede ahí sino que el alza no pierda vigor.

Desprevenidos agarraron a los compradores que casi han hecho del llevar pan a sus casas un ritual, pues dejar a las mesas sin ese alimento, es casi que quitarles el alma a los hogares.

El pan grande que hace unos días costaba entre 35 y 50 Bs.S, lo cual de por sí ya resultaba oneroso para la mayoría de tachirense, se han encontrado con la desagradable sorpresa de ver las etiquetas que te advierten su costo por el orden de los 70 Bs.S  los de tamaño grande y composición sencilla, sean de dulce o de mantequilla.

Muy pocos se resignan a pagar tal precio, otros salen volando como si hubiesen visto al diablo, y otros quedan como estatuas contemplativas, tratando de ver si lo que había ocurrido era un engaño de sus ojos. Sea como sea, la etiqueta a la vista de todos mostraba su guarismo con su buen número de ceros por detrás o en su versión sintética, la que ahora llaman el  Bolívar Soberano.

La costumbre, e incluso la falta de alternativas, llevan a los que le es asequible, pagar cualquier cifra que se les imponga sin chistar; pues el pan no debe haber pan para la casa sino también para el camino, para la merienda, incluso para improvisar un plato principal.

Una de las personas que prefirió abstenerse de comprar pan, vio como mal augurio este incremento, un reflejo a lo que sucederá con el resto de la cesta básica.

Hasta los momentos no ha habido un pronunciamiento de parte de los gremios del sector para justificar tal aumento, gracias al cual se conocería si el alza se correspondería a la estructura de costos actual, o sería la preparación a la carga laboral que tal tipo de empresas debe asumir. Lo cierto es que de manera oficial no se sabe si tal alza ha sido autorizada o no.

Freddy Omar Durán