El ingreso al hospital de Tibú del venezolano Luis Alberto Flórez Díaz, de 19 años, herido con impactos de bala, fue el presagio de un ataque indiscriminado que dejó a otros dos hombres muertos, en zona rural de este municipio del Catatumbo, según publica diario La Opinión.
Flórez alertó a las autoridades del hecho que se registró en una casa ubicada en el sector Las Minas, cuando un grupo de hombres armados llegó y atacó a balazos a las personas que estaban en la vivienda.
“Verificamos la situación con el Ejército y cuando llegamos al lugar encontramos los cadáveres en el piso. Se tiene conocimiento de que allí funciona una casa de lenocinio (proxenetismo-prostitución) y que estaban algunos venezolanos”, dijo el coronel George Quintero, comandante de la Policía de Norte de Santander, al referirse al hecho registrado este miércoles.
Entre las hipótesis que manejan las autoridades -agrega La Opinión- está la de una posible retaliación por la venta de drogas en el lugar, aunque avanzan en las verificaciones para esclarecer los móviles de los hechos.
“Por ahora, se sabe que había personas consumiendo drogas y llegaron a matarlas”, dijo un habitante de Tibú.
Uno de los cadáveres quedó en una habitación, mientras que la otra víctima, que alcanzó a correr, cayó muerto en el baño.
A mediados de agosto, hombres encapuchados asesinaron a tres venezolanos cuando dormían debajo de un puente, en la vereda La Hamaca de Tibú.
Entre las víctimas murió una mujer, que estaba con su pareja sentimental y otro hombre.
En lo corrido de este año, en Tibú se han registrado 60 homicidios, mientras que en 2017 ocurrieron 69, convirtiéndolo en el segundo municipio más violento del departamento.
“Avanzamos en las investigaciones contra los grupos armados ilegales que generan hechos violentos en el Catatumbo, a costa de sangre y fuego, por la disputa del territorio”, agregó el oficial. (MB)