Skip to main content Skip to footer
  • Inicio
  • Política
  • Regional
  • Frontera
  • Nacional
  • Internacional
  • Opinión
  • Legales
  • Obituarios
  • Sucesos
  • Deportes
  • +Sec
    • Clasificados
    • Cosas del Mundo
    • Compilado Musical
    • Cultura
    • Economía
    • Farándula y Espectáculos
    • Flash
    • Infogeneral
    • Noche de Ronda
    • Reportajes y Especiales
    • Tecnología
    • Salud
    • Tachirenses en el mundo
    • Noche de Ronda
    • Obituarios
    • _________

Buscar en Diario La Nación

La Nación RadioPublicidad
Set Of Black Circle Social Media Logos With New X logo-ai
Set Of Black Circle Social Media Logos With New X logo-ai
Set Of Black Circle Social Media Logos With New X logo-ai
Set Of Black Circle Social Media Logos With New X logo-ai
ImpresoMiniavisos
  • Inicio
  • Política
  • Regional
  • Frontera
  • nacional
  • Internacional
  • Opinión
  • Legales
  • Obituarios
  • Sucesos
  • Deportes
  • + sec
    • Clasificados
    • Compilado Musiacal
    • Cosas del Mundo
    • Cultura
    • Economía
    • Farándula y espectáculos
    • Infogeneral
    • Marcas y negocios
    • Noche de Ronda
    • Reportajes y Especiales
    • Salud
    • Tachirenses e el mundo
    • Tecnología
Inicio/Opinión/No podrán escapar de la justicia

Opinión
No podrán escapar de la justicia

jueves 29 noviembre, 2018

La justicia humana, sobre todo en relación a los delitos de corrupción, los llamados delitos “contra la cosa pública”, a veces tarda mucho, pero suele llegar, así sea “tuerta”…  Se alega, y tiene mucho de cierto, que una justicia tardía no es una verdadera justicia. Pero es preferible la justicia tardía a la falta de justicia. Todo esto viene a cuento por la gran cantidad de casos de corrupción que se están ventilando en fiscalías y tribunales extranjeros, en especial de Estados Unidos y Europa, y que involucran directamente a funcionarios de la hegemonía y a sus testaferros. Casos que corresponden al muy menguado siglo XXI venezolano.

No podía ser de otra manera, porque si la hegemonía roja ha sido y es el régimen político más corrupto del planeta –en criterio de gente que apoyó a ese régimen y que incluso formó parte de su jerarquía– entonces sólo era cuestión de tiempo para que la colosal corrupción se fuera revelando, como en efecto está ocurriendo en medio mundo. Dentro de Venezuela, las cosas también se saben, pero campea la impunidad. De hecho, muchos de los principales corruptos provienen del sector judicial. ¿Qué pasa cuando entran cataratas de petrodólares y se erradica todo tipo de controles sobre su manejo y disposición? Pasa lo que ha pasado y está pasando en la Venezuela del predecesor y del sucesor.

No vale la pena dar más nombres, porque éstos son conocidos hasta la saciedad. Figuran en las numerosas listas de sancionados por gobiernos foráneos, figuran en las denuncias penales que han sido presentadas en la Fiscalía venezolana (aunque esas denuncias se encuentren engavetadas), figuran en las rigurosas investigaciones de medios de comunicación internacionales, a partir de informaciones oficiales suministradas por organismos jurisdiccionales, figuran en los encausamientos y condenas preventivas de esos mismos organismos, y figuran en las acusaciones formales ante instancias penales de carácter internacional.

Los mega-corruptos de la boli-plutocracia no son una especie uniforme. Los hay rojo-rojitos, pero también de otros colores. La depredación masiva que ha sufrido Venezuela y que, en parte, explica que esté sumida en una catástrofe humanitaria en medio de una bonanza petrolera, ha sido de tal magnitud que los recursos depredados se han repartido a diestra y siniestra en todo el espectro político, con honrosas excepciones, y también a lo largo y ancho de los especuladores financieros. Ya lo afirmaba Lord Acton: el poder corrompe y el poder absoluto, corrompe absolutamente. De pronto, no es la mejor traducción de su conseja, pero se entiende bien.

Estos capitostes no podrán escapar a la acción de la justicia. Y eso incluye a los personajes más representativos de la hegemonía. Sí, la justicia humana puede que tarde, puede que tarde demasiado, pero cuando llega, llega con la fuerza del derecho y la vindicación de los afectados por la injusticia. En este caso, casi toda una nación. La nación venezolana.

[email protected]

Fernando Luis Egaña

Dos meses de desastres y tristezas en el barrio Eleazar López Contreras

Regional

Diócesis de Trujillo se prepara para canonización de José Gregorio

Regional

La Guaira líder mandón y sólido; Táchira y Carabobo sin invictos

Deportes

Destacados

Sin distingo para servir

Gobierno prohíbe por 30 días la compra, venta y uso de drones en todo el país

Secuelas en frontera a 10 años del cierre

Muere arrollado un sexagenario en Andrés Bello

Maduro: ha llegado el momento de activar la Zona Binacional N°1

Editorial Torbes CA
J-070059680

Miniavisos

Edición Impresa

Mapa del sitio

Política de privacidad

Sobre Nosotros