Reportajes y Especiales
Inmigrante venezolana cruzó río Arauca con bebé en brazos
8 de diciembre de 2018
Cansada de la crisis del país, una venezolana tomó a su bebe y emprendió su travesía para llegar a Perú con la finalidad de brindar un mejor futuro para su hijo, ya que en Venezuela, “no se consigue nada, no hay nada que comprar”, según reseña El Tiempo de Bogotá.
La enfermera Shariti Paredes, residía en Valencia, estado Carabobo y tenía dos empleos, “todo estaba bien hasta que dos trabajos no fueron suficientes y ya al nacer el bebé bueno, imposible trabajar”.
“Nos vinimos por Arauca porque en Cúcuta no podía pasar por el bebe, en vista de que no hay medicinas, no hay pañal, no hay alimentos no hay nada decidí viajar con mi pasaporte”, relató consternada a El Tiempo de Colombia.
Paredes, detalló que logró entrar al país vecino con un permiso especial para permanecer cinco días, pero “llegué a migración y me dijeron que yo no podía pasar porque el bebe no tenía pasaporte, cosa que me habían dicho que si podía pasarlo con el acta de nacimiento”.
Dada las circunstancias la venezolana se vio en la necesidad de tomar a su bebe y cruzar el rio Arauca, con el objetivo de seguir su rumbo a Lima, Perú, donde una amiga la está esperando con su hijo menor de edad.
“Pero estoy esperando que las personas que conocí en el viaje sellen su documentos para poder irme con ellos porque ando sola, dos maletas, el bebe y un pote de agua”, precisó.
Paredes cuestionó garantizar un futuro a su hijo en el país, “si uno ni siquiera puede salir a la esquina, porque si sales te roban. No puedes comprar nada, ya no hay nada, no hay nada que comprar”, insistía.
La venezolana que tomó su rumbo a pesar de las dificultades por la documentación de su bebe, lamentó que la reconversión monetaria impidiera la obtención de efectivo a sus familiares para poder salir del país.
“Tengo familiares que quieren viajar y ni siquiera pueden hacerlo porque no hay efectivo, con el nuevo cambio monetario fue peor, ahora ni siquiera está el efectivo para uno poder decir me voy por la trocha y después de ahí que sea lo que Dios quiera”, lamentó.