El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, «no fue invitado» a la ceremonia de asunción del presidente Jair Bolsonaro, aseguró el futuro ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Ernesto Araújo.
«Por respeto al pueblo venezolano, no invitamos a Nicolás Maduro a la investidura del presidente Bolsonaro», que tendrá lugar el 1 de enero, publicó Araujo ayer en su cuenta de Twitter.
«No hay lugar para Maduro en una celebración de la democracia y del triunfo de la voluntad popular brasileña. Todos los países del mundo deberían dejar de apoyarlo y unirse para liberar Venezuela», agregó el futuro jefe de la diplomacia del gobierno de extrema derecha, reseló
Tradicionalmente, todos los jefes de Estado sudamericanos son invitados a la investidura de los presidentes brasileños.
Electo el 28 de octubre con 55% de los votos, Jair Bolsonaro criticó fuertemente al Gobierno venezolano a lo largo de su campaña.
En algunos de sus mensajes aseguraba que Brasil podría transformarse en una nueva Venezuela si la elección la ganaba su rival de izquierda Fernando Haddad.
Un día después de su victoria, Bolsonaro descartó cualquier eventual intervención militar en Venezuela a pesar de las «serias dificultades» causadas por la «dictadura» de Maduro.
Como los otros países vecinos de Venezuela, Brasil ha recibido importantes contingentes de migrantes de ese origen.
El miércoles, Maduro acusó al gobierno de Estados Unidos de implementar un plan para «asesinarlo», con la ayuda de las administraciones conservadoras de Brasil y Colombia.
Ernesto Araujo anunció en Twitter que Brasil se retirará del Pacto Mundial sobre las Migraciones de la ONU una vez que Bolsonaro asuma el cargo.
En contraste, el canciller de la República, Jorge Arreaza, mostró en la red social Twitter dos notificaciones enviadas al Gobierno nacional -una de parte de la Embajada de Brasil en Venezuela y otra del Ministerio de Relaciones Exteriores de ese mismo país- donde se invitaba a Maduro a la toma de posesión de Bolsonaro. AFP