Con un balance negativo cerró el año 2018, y abre el nuevo con innumerables problemas la comunidad de La Victoria en el municipio Guásimos, luego de peticiones y solicitudes que nunca han sido escuchadas por parte de los organismos competentes.
El abandono comienza en la vía principal, exactamente en el puente La Salada por el colapso de una cloaca proveniente de la parte alta del sector y que amenaza con problemas de salud, deteriorar la calzada, así como la infraestructura del puente que ya años atrás se derrumbó por filtraciones y dejó sin paso por varios meses a los habitantes de Curazao, La Aduana y La Victoria y como vía alterna hacia La Laguna y el municipio Cárdenas. A esto se le suma calles llenas de huecos. El problema ya es del conocimiento de la alcaldía municipal con oficio firmado por la comunidad afectada.
El gas también estuvo en la lista de los operativos gestionados para el municipio y, a pesar que la comunidad se organizó, los jefes de calle entregaron los requerimientos, se entregaron tickets, y se formaron comisiones todavía no han sido atendidos los sectores correspondientes a las partes alta y baja de La Victoria y así lo exponen los vecinos para la sección #YoreportoaLaNacion.
Es también del conocimiento de la empresa Cantv, de algunas viviendas sin el servicio teléfónico desde hace algunos meses, esto los deja sin internet. En la oficina comercial de El Ángel, en San Cristóbal responden que no pueden hacer nada debido a un reporte de hace tres años por el robo de cableado, cuando en realidad la comunidad pagó, en ese momento,a un equipo técnico y solucionaron, pero ahora a pesar de los cinco correos internos resulta imposible que eliminen ese reporte para poder procesar uno nuevo, nadie da respuesta y menos la solución.
Y cerró el año 2018, sin que el encargado de organizar el recorrido de los camiones del aseo urbano en la alcaldía incluya a La Victoria como parte del municipio, desde hace tres meses no recogen basura a pesar que este servicio fue cancelado a principio de año, por un servicio infuncional y pésimo que atendió el sector unas cinco veces durante el año.
De igual modo, la inseguridad se ha apoderado del sector debido a la falta de alumbrado público, sustitución de bombillas, mantenimiento, así como nula vigilancia y patrullaje. Las calles son permanentemente transitadas por sus pobladores a pie por la inexistencia de transporte público, mientras que el Transtachira, único que existía y cubría la ruta Palmira-Táriba no trabajó desde hace dos semanas por las festividades decembrinas que además, una unidad resulta insuficiente para cubrir la demanda de gran cantidad usuarios.
El Clap llegó sólo dos veces en el año y, en el mes de diciembre a pesar del anuncio del protector del Táchira estarían siendo entregadas las cajas, nunca llegó. Queda en manos de quienes tienen competencia en el municipio, la Gobernación, incluyendoa Freddy Bernal protector del Táchira, quien este enero cumple un año en funciones para que constate el abandono en el que se encuentra esta laboriosa comunidad de La Victoria en el municipio Guásimos. (EMCC)