Desde el mediodía hasta alrededor de las dos de la tarde, San Cristóbal se mantuvo en relativa calma mientras en algunos puntos se concentraban las protestas pacíficas en reclamo de una solución a la crisis económica, política y social que afecta el país.
Los que acataron los llamados a la protesta, lo hicieron de varios modos: ya sea caceroleando desde sus casas, tocando bocinas desde sus vehículos, lanzándose a la calle junto a sus vecinos, o reuniéndose en puntos de mayor convocatoria como lo fueron la Plaza Tinoco, el Obelisco, la Plaza Bolívar, entre otros.
En general la actividad se desarrolló sin incidentes que lamentar pero sí con el entusiasmo y el arrojo de quienes no tuvieron miedo de dar la cara, enarbolar banderas y pancartas, y levantar consignas en desconocimiento al mandato presidencial de Nicolás Maduro.
El tráfico por la capital tachirense transcurrió sin mayores trancones, que apenas se reportaron en la Quinta y Séptima Avenida, la Avenida Rotaria, la Avenida 19 de Abril y la Avenida Carabobo.
En las acciones de calle además de denunciar la grave crisis en todos los órdenes que sufre Venezuela, también se reafirmó el apoyo a Juan Guaidó como presidente interino. De otra parte se entre los congregados se coordinó de lo que será las marchas en pro de una sola causa democrática a desarrollarse este sábado 2 de febrero.
No solo las pancartas, muchas de ellas elaboradas en cartón, le hacían un reclamo al Estado nacional, sino lo dirigían a la Gobernadora Leidy Gómez a que tomará una posición respecto a la situación política que vive el país. De otra parte se solicitaba la atención de la comunidad internacional a la problemática que vive nuestro país, y se demandó la inmediata apertura de un canal humanitario.
En las pancartas se sintetizaba parte del ideario que ha animado la protesta que incluye un gobierno nacional de transición, elecciones libres, ayuda humanitaria urgente, un rechazo a la usurpación, entre otros llamados.
En el Obelisco ganaderos, empresario, saludaron la actitud contestaría y activa de la ciudadanía, así como invitaron a los colegios profesionales a declararse en desobediencia y en reunión permanente. El sector ganadero se declaró perseguido, que no puede sacar un kilo de carne de sus unidades productivas porque está humillado. E igualmente el sector educativo les recordó a los presente la lucha que han venido desarrollando en estos días en busca de un salario digno.
Durante las protestas se escucharon las quejas por lo que consideran una situación invivible donde el salario mínimo ya no cubre las más elementales necesidades de alimentación de los venezolanos. Así mismo se reiteraron las quejas por la escasez de productos de primera necesidad especialmente en el rubro salud, donde muchas personas con enfermedades crónicas no logran conseguir la medicación requerida.
Freddy Omar Durán