Regional
Estaciones de servicio para motos ya no tenían colas al mediodía
19 de marzo de 2019
La decisión de asignar tres estaciones de servicio para exclusivamente atender motocicletas, no parece ser muy beneficiosa para mejorar el suministro a los automovilistas. La razón es que, aparentemente, no hay suficientes motos en la ciudad como para que ocupen precisamente tres estaciones de servicio.
Así opinan algunos sancristobalenses consultados indiferentemente sobre la decisión que fue asumida por el llamado “Comando Mayor del Combustible”, dependiente del ente militar Redi, que el sábado notificó a los propietarios de las estaciones de la decisión tomada.
La motivación de esta nota surgió justo a mediodía de este lunes, primer día de aplicación de la medida, cuando se pudo apreciar que la masiva concurrencia de motos en las primeras horas de la mañana, a las estaciones asignadas: la Continental, frente a Diario La Nación; la de enfrente del Cementerio y la Guadalupe, prácticamente estaban desoladas a mediodía. Los motorizados llegaban y pasaban directo a surtir sin preocuparse de más nada.
Mientras tanto, centenares de conductores de autos hacían larga cola en otras estaciones, para proveerse del combustible.
¿Cuántas motos hay en San Cristóbal?
Sacando algunos cálculos empíricos, se puede deducir que una gandola de gasolina, transporta 38 mil litros, al decir de alguien conocedor de la materia. Y consultando con motorizados y bomberos, informaron que el cupo para cada moto, es de ocho litros por día. Eso significa que un cupo de la gandola abastecería unas 4 mil setecientas cincuenta unidades.
Si son tres bombas las designadas por la sabia medida militar, significa que cerca de 15 mil motos podrían echar gasolina cada día ¡Quince mil motos!, que igualmente pueden acudir al siguiente día a apertrecharse.
Con esa gasolina, dijo un bombero, o islero –como también se les conoce a quienes se encargan de llenar los tanques de los vehículos en la estación de servicio–, y al ritmo lento que hemos visto hoy, podríamos estar atendiendo hasta tres días, porque ya a esta hora, no son muchas las motocicletas que llegan.
¿No es mejor como se estaba haciendo?, pregunta alguien que estaba tratando de conseguir una explicación. Asignar un horario para atender las motos, y luego a los otros vehículos. Lo que pudimos apreciar en este primer día de experiencia, es que aparentemente, a partir de la una de la tarde las bombas seleccionadas podrían atender los automóviles, y así aliviar la desesperante espera en una cola para echar gasolina.
Humberto Contreras