(AFP) Este jueves, varias ciudades de Venezuela, incluidas amplias zonas de Caracas, y del estado Táchira comenzaron a recuperar paulatinamente el suministro eléctrico tras un masivo apagón que afecta al país desde el lunes.
Según el Gobierno, un “ataque terrorista” dejó sin electricidad a la mayoría de los 24 estados del país». Desde entonces, la empresa eléctrica estatal batallaba por reponer el servicio, pero en la mañana del jueves quedaban zonas sin luz debido a fallas en el mayor complejo hidroeléctrico del país.
Las principales ciudades intentaban retomar su ritmo habitual, pero muchas amanecieron con poco movimiento, luego de que el gobierno de Nicolás Maduro extendiera la suspensión de actividades escolares y laborales hasta el viernes.
La noche del miércoles, Maduro asomó la posibilidad de aplicar un plan de entrega escalonada del servicio de energía.
“Quiero dejar bien claro ante el país y el mundo que gracias a la experticia de los trabajadores de Corpoelec estamos garantizando el servicio, pero tendremos que aplicar un plan de administración de carga en próximos días”, dijo el mandatario sin ofrecer mayores detalles.
Especialistas sostienen que los apagones son producto del deterioro en la infraestructura tras años de falta de inversión en el sector, nacionalizado en 2007 por el fallecido presidente Hugo Chávez. Tras los últimos expertos, el Sistema Eléctrico está aún más vulnerable.
El apagón afectó las operaciones en el principal terminal de exportación de petróleo del país, y los cuatro mejoradores de crudo extrapesado, controlados por la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), también estaban paralizados.