HACE UN TIEMPO, no se prendieron las luces de alarma en el momento que los laboratorios transnacionales que operaban en el país anunciaron su retiro por falta de pagos en divisas para repatriarlos a sus respectivos países…..MÁS BIEN la respuesta fue que no había problemas, pues aquí había suficiente capacidad de fabricación de medicinas y de recursos para importar lo necesario…..TAMPOCO se llamó la atención en el instante que una aerolínea europea informaba su cese de operaciones, a la que le siguieron luego más de una docena, y a las que se amenazó que se fueran las que quisieran, pues ninguna podría regresar al espacio aéreo venezolano…..CUANDO SE adelantó de un posible cierre de compra de petróleo de parte de los Estados Unidos, se alardeó que así el crudo quedara en cero dólares, nuestra economía estaba lo suficientemente blindada como para no temer ninguna catástrofe financiera…..RESULTA QUE AHORA, analizando solo estos tres casos, la falta de medicinas es tan ostensible, se señala que hasta en un 90%, que se está recibiendo hasta la hace poco renegada Ayuda Humanitaria para ver si se logra paliar la crisis en nuestros hospitales y la agonía de muchos enfermos crónicos que no encuentran lo que necesitan …..Y SI DE COMUNICACIONES aéreas se trata, solo hay que ver lo desolado que se encuentra nuestro principal terminal, Maiquetía, para constatar el aislamiento en que nos encontramos y que igualmente se profundiza en los aeropuertos del interior, a tal punto que los vuelos permanentes de los que antes se disfrutaba, se han reducido penosamente……EN CUANTO a la venta de nuestro petróleo, la situación luce mucho más dramática, pues de 3.5 millones de barriles diarios de producción, apenas si sobrepasamos los 700 mil, y a pesar del aumento del crudo a nivel mundial, en estos momentos en nada nos favorece, pues estamos obligados a enviar el hidrocarburo a China y Rusia como parte de pago a las deudas mantenidas, y otra parte a precios preferenciales por los compromisos acordados con Cuba y el Caribe……TRAS EL DESARROLLO de estos episodios, nadie alertó sobre el incierto futuro que nos esperaba y como decía el recordado Teodoro Petkoff, nos esperaba en la bajadita, para asestarnos el golpe del palo cochinero a nuestra endeble economía que a estas alturas se está buscando tapar con parches como la sinceración de la moneda frente al dólar o lo que ya se está tomando como fatídico aumento del sueldo mínimo que en lugar de solucionar la crisis, la profundiza, pues las cosas no están siendo tomadas por los cachos, sino haciendo gárgaras o buches, o lo que es peor, con pañitos de agua tibia a una fiebre que está pasando de los 40 a la locura hiperinflacionaria que no nos quiere abandonar desde hace más de dos años.
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Y ESTO, es todo por hoy.
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MENTIRAS Universales:
“Me siento mejor en la soledad”.
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DIOS, los bendiga, ¿Saben?
VICTGOR MATOS