En opinión del director de Política de la Gobernación, Carlos Romero, “la dirigencia de la MUD estafó a sus precandidatos con el dinero que solicitan para la inscripción a las primarias y, más que una elección interna, lo que organizan parece una rifa”.
“Con ese proceso al que están convocando para septiembre, los supuestos precandidatos nuevamente buscan estafar al pueblo del Táchira con falsas promesas y propuestas”, alegó.
Romero reprochó que “dentro de la derecha valoren más el poder adquisitivo de los postulados que su currículo y planes para el estado, aspectos que son de mayor importancia para la responsabilidad a la que aspiran”.
— Según la MUD, no se necesita de un perfil, de una propuesta de gobierno; qué aportes tienen para el estado Táchira, tanto en lo económico y fronterizo, como en lo social; allá lo que impera es, como en las mafias y como en la cárcel con los pranes, quiénes tienen más dinero -criticó Romero-.
Además, calificó de “lamentable” que los precandidatos se han quejado por no conseguir recursos para la ejecución de obras, siendo diputados o alcaldes, pero “de manera inmediata consiguieron más de 8 mil dólares, a un precio que seguramente no es Dicom”.
De modo que: “En la ruleta o rifa en la que convirtieron las primarias de la MUD, no saldrá victorioso el más apoyado por el pueblo, sino el que ha colocado más divisas o recursos en Caracas para obtener la designación”.
— Es repudiable que el proceso de escogencia sea excluyente, ya que no permiten que cualquier líder de la derecha se inscriba, lo han limitado a una pequeña élite que cuenta con financiamiento extranjero de la parapolítica, de narcotraficantes, del imperio norteamericano, de grupos de empresarios que no quieren a la patria -expuso Carlos Romero-. Consideró además que: “Ningún perfil de ellos se compara con el de nuestro líder y jefe político del estado, José Vielma Mora, que ha demostrado cabalmente el compromiso, la actitud y la preparación para llevar las riendas del Táchira”; y vaticinó que las elecciones de la MUD “serán “fraudulentas, por la ausencia del CNE, lo que les permitirá inflar y adulterar las cifras”. (Leidy Zafra)