El técnico toscano tuvo varias reuniones el miércoles y el jueves con los dirigentes del club turinés, lo que parecía acreditar la idea de un desacuerdo entre las partes, que habían asegurado sin embargo que Allegri iba a quedarse.

Tras la eliminación de la Juventus por el Ajax de Ámsterdam en cuartos de final de la Liga de Campeones, Allegri y su presidente Andrea Agnelli habían declarado que no harían cambios la próxima temporada.

“Con el presidente, hemos hablado hace unos días con la idea de volver a verse. Pero mi decisión la tomé hace tiempo y es la de quedarme. Tengo un contrato y hay trabajo que hacer”, había declarado Allegri.

“Será con Allegri en el banquillo, seguro”, había asegurado por su parte Agnelli. “Tiene todavía un año de contrato. Vamos a sentarnos a final de temporada para hablar. Tenemos una plantilla joven y fuerte, incluido el equipo técnico. Vamos a volver a intentarlo (con este grupo) la próxima temporada”, añadió.

La llegada de Cristiano Ronaldo esta temporada había hecho de la Liga de Campeones el objetivo prioritario de la temporada turinesa, todavía más que los años precedentes.

Pese a un nuevo título ganado con facilidad en la Serie A, el fracaso frente al Ajax fragilizó a Allegri, fuertemente criticado desde entonces en Italia por un juego demasiado conservador.