Sucesos
Señalado de sicario y extorsionador detuvieron a un venezolano en Cúcuta
24 de mayo de 2019
Como Yilbert P., fue identificado el joven venezolano detenido por las autoridades colombianas, señalado de ser un sicario y extorsionador del grupo criminal conocido como “La Línea”.
Hasta hace algunos días –informa La Opinión-`el presunto accionar delincuencial del venezolano, también llamado El Mocho o Sebastián, era casi desconocido para las autoridades en Cúcuta.
Sin embargo, los investigadores de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) de la Policía Metropolitana de Cúcuta tuvieron información de que este hombre presuntamente es integrante de la banda La Línea, encargado de controlar las extorsiones en la trocha conocida como La Isla, en El Escobal.
A las 3:30 de la madrugada del martes, un hombre alertó a la Policía sobre su presencia sospechosa en la avenida 6 con calle 0 en un hotel del barrio La Merced. Al parecer -dijo- Yilbert pretendía cometer un homicidio.
Por ello, los uniformados arribaron de inmediato al lugar.
Los policías le hallaron una pistola marca Glock con 45 cartuchos y dos proveedores siendo capturado por el delito de porte ilegal de armas.
“Al parecer, El Mocho era uno de los sicarios y hombres de confianza de Jesús José Hernández Almarza, alias Causa, cabecilla de esta estructura delincuencial, dedicada a la extorsión, el desplazamiento forzado y homicidios”, señaló uno de los investigadores del caso.
“Causa” estaría escondiéndose de las autoridades en el sector de La Mulata, en el municipio Pedro María Ureña, Venezuela, por las órdenes de captura que tiene en su contra.
Según se conoció, La Línea estaría apostándole a tomar el control del negocio del microtráfico de drogas y el cobro de extorsiones en la avenida 7 del barrio El Callejón, agrega el diario neogranadino.
El coronel José Luis Palomino, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, aseguró que Yilbert, presuntamente tiene relación con tres hombres que fueron capturados en la trocha El Águila de El Escobal, cuando portaban dos pistolas y una subametralladora.
Miriam Bustos