“Las expediciones comerciales han prostituido el Everest”, denuncia en ‘Marca’ el montañero Juanito Oiarzabal tras conocerse las dos muertes de los últimos días, en pleno atasco en el camino a la cima, que a diferencia de otras no entraña excesivas dificultades técnicas. Pero… ¿cuánto cuesta escalarla?
Subir el Everest cuesta, al menos, 27.000 euros, aunque la mayoría de los expedicionarios pagan cantidades próximas a los 40.000 y hay quien acaba pagando más de 115.000. Las cifras proceden de Alan Arnette, cronista del Everest y una autoridad en la materia cada año, cuando publica datos e información actualizada.
El gasto se desglosa en cuatro grandes apartados. Para empezar, el coste del desplazamiento, que puede oscilar entre 500 y 10.200 dólares, según el punto de origen. A ello hay que sumar los vuelos de ida y vuelta en avioneta a Luckla o Lhasa, según si elegimos atacar la montaña desde Nepal o desde el Tíbet.
Luego vienen los permisos y el seguro, las tarifas de escalada y, por supuesto, el material de montaña. Un sinfín de gastos y trámites que el escalador se puede ahorrar ya que, por supuesto, existen agencias especializadas para encargarse de todo.
20 Minutos