Una vez le fue practicada la autopsia que revelaría la real causa de muerte de un bebé de cinco meses, que estaba recluido en el Hospital Central desde el 20 de octubre, funcionarios del Cicpc-Táchira efectúan las correspondientes indagaciones que les permitirán establecer la responsabilidad en el hecho, de que el infante murió al ser perforado uno de sus pulmones.

Indicó una fuente policial que, tal como se había informado oportunamente, los investigadores aguardaban por el resultado de la necropsia de ley, que este domingo se le practicó al pequeño cadáver en la morque del Hospital Central de San Cristóbal, a fin de conocer las diligencias a seguir, una vez se estableciera si el fallecimiento ocurrió a raíz de la lesión que sufrió al caerse de una cama, en su casa de San Antonio del Táchira, o fue producto de otro factor adicional.

Dijo la fuente que sobre la lesión que el bebé sufrió en la cabeza tras la caída, se pudo conocer que fue leve, no letal, y que una vez intervenido quirúrgicamente se restablecía satisfactoriamente en el primer centro asistencial, pero al descubrirse que murió porque uno de sus pulmones fue perforado, las investigaciones tomaron otro rumbo.

Esto indicaría que los funcionarios se centran en averiguar quién y en qué momento y circunstancias, luego de ser recluido y operado el pequeño en el hospital de San Cristóbal, seguramente de manera accidental, le provocó el daño que al final lo llevó a la muerte, posiblemente durante alguna acción que, como tratamiento médico postoperatorio, le hicieron.

El Ministerio Público está al tanto de este lamentable caso y coordina con el Cicpc las diligencias a desarrollar, a fin de que el autor o autora del hecho asuma su responsabilidad por lo que hizo.

Miriam Bustos