Un grupo especial migratorio de la Policía de Bucaramanga identificó este sábado 27 de julio, durante un control, a un hombre de nacionalidad venezolana que se desplazaba hacia Santander con un menor.

Al realizar la verificación de los documentos de identidad, las autoridades no encontraron coincidencia de los apellidos entre el hombre y el niño.

“Encontramos en este operativo a un niño, que no eran sus padres los que lo tenían ahí y procedimos a expulsar a cinco personas del territorio santandereano”, indicó Andrés Fandiño, secretario del Interior de Santander.

El menor recibe acompañamiento del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), mientras que el sospechoso quedó a disposición de las autoridades. Estos operativos continúan en parques, calles y avenidas.

“Hemos participado de 108 programas orientados sobre parques, hoteles, restaurantes, semáforos y vías, tratando de rescatar a niños que se encuentran en estado de vulnerabilidad”, señaló el general Manuel Vásquez, comandante de la Policía de Bucaramanga, a medios de la nación vecina.

Esta semana, un programa de TV de Colombia denunció que padres venezolanos se prestaban para dar a sus hijos a redes de trata, para ponerlos a mendigar.

De ser hallado culpable, el sospechoso podría ser judicializado por delito de explotación infantil.

Denuncian que la llegada de migrantes venezolanos al país vecino agudizó la mendicidad en ciudades como Valledupar. Las autoridades adelantan controles para evitar que los niños caigan en esta situación.

La primera jornada de control se adelantó en los alrededores del mercado público y cercanías a la glorieta La Ceiba.  Durante los operativos encontraron varios adultos con menores en su poder, sin identificación.

“No tienen ninguna documentación, la Policía les está dando un término de 15 a 30 minutos para que los padres de los menores consigan los registros civiles, un documento que demuestre que efectivamente es el padre del menor”, señaló Denia Zuleta Castilla, defensora del Pueblo regional del Cesar.

Durante la jornada también buscan sensibilizar a los adultos sobre las consecuencias legales que podrían tener al no presentar documentos de los menores que se encuentran en las calles con ellos.

De detectar casos de mendicidad y de niños trabajando en la calle, habrá sanciones para los adultos que los acompañan. “Ha sido una orden de despacho que se restablezcan los derechos del niño y se judicialicen todas las personas que están cometiendo este tipo de delito”.