Regional
De al menos tres atroces crímenes señalan a paramilitares detenidos
27 de agosto de 2019
Durante una rueda de prensa para ofrecer el balance operativo (julio-agosto), en compañía de jefes y directores de organismos de seguridad, así como de representantes del alto mando militar, Freddy Bernal, protector del Táchira, entre otros importantes puntos, reveló que al grupo de presuntos paramilitares de Los Rastrojos, capturados recientemente en la zona norte del estado, se le atribuye al menos tres crímenes atroces, en los que las víctimas fueron desmembradas y sepultadas.
Aclaró Bernal que este grupo al que hizo mención no tiene nada que ver con las bandas criminales que operan entre San Antonio y Ureña, que se dedican a decapitar a sus víctimas.
En cuanto a los siete presuntos paramilitares aprehendidos hace dos semanas por el Cicpc-La Fría y el Ejército, en la aldea Nuevo Camino de La Palmita, municipio Panamericano, entre los que se encuentran dos mujeres y un adolescente, dijo que las investigaciones han establecido hasta el momento su implicación en las muertes de Carlos Julio Quiroga Zambrano, de 45 años; Jairo Méndez, de 20 años, y Reiby Arias de 35 años.
Sin embargo, aseguró que las indagaciones continúan, así como la posibilidad de hallar a otras de sus posibles víctimas, asesinadas de la misma manera, y que incluso bien pudieran haber sido en su momento integrantes de la misma banda de Los Rastrojos.
Bernal recordó la identidad de los detenidos y sus alias:
Baudilio D., de 42, alias Comandante Yiyo; José M., de 25 años, alias Picure; Oscar M., de 29, alias Loco Loco; Carlos G., de 24 años, alias el Menor; Carla M., de 18 años, alias Bellota; María H., colombiana, alias la Cuchillo, y un adolescente de 16 años, apodado Pelo e´chiva y el Descuartizador.
Ese mismo día que se desarticuló la banda se logró el rescate de una adolescente que había sido reportada como desaparecida.
En cuanto al caso de Carlos Quiroga Zambrano, una de las víctimas de esta agrupación, Bernal informó que su cadáver, desmembrado y sepultado, fue localizado en un área boscosa del sector Chispa Alto Viento, en La Palmita. La víctima había desaparecido unas semanas antes del hallazgo.
Alias Picure habría sido el autor del crimen; mientras que en el sector Mata Limón, del mismo municipio Panamericano, fueron hallados desmembrados los cuerpos de Jairo Méndez y Reiby Arias, quienes habían desaparecido seis día antes. El doble crimen lo habría perpetrado alias la Cuchillo, la colombiana capturada.
Bernal también mencionó que en el cerro El Rayo “dimos un golpe a estructuras paramilitares, al desarticular una base de comunicación que operaba con sistema encriptado direccionado hacia Colombia, en acción coordinada entre el Gabinete de Comunicaciones y la Fanb, en aras del respeto a nuestra soberanía”.
Miriam Bustos