Política
“Recibo el Hospital Central sin insumos, sin tomógrafo y sin unidad de radioterapia
5 de noviembre de 2017
La gobernadora del estado, Laidy Gómez, aseguró tras hacer un recorrido por las diferentes unidades del Hospital Central de San Cristóbal, que lo recibía en “condición crítica, de desconocimiento humano, falta de amor y afecto con la población tachirense”.
Denunció que no tiene insumos, tomógrafo, porque tiene cinco años dañado y sin unidad de Radioterapia. Pero anunció que pedirá recursos ante los entes gubernamentales y hará alianzas con el sector privado, la Iglesia y los espacios legítimos a donde tenga que ir para que “no se siga atentando contra la vida de los tachirenses”.
“El informe financiero que me han dado es muy crítico, pero tengo fe en los sectores privados que me han manifestado disposición de ayudar a resolver el problema de insumos inmediato que tiene el hospital. He visitado varias áreas y debo decir que el hospital no tiene gasa, no hay máquinas cortadoras de gasa y la cortan con cuchillos oxidados; no tiene una inyectadora, fórmulas lácteas en la Unidad de Neonatología, guantes, adrenalina”, dijo en compañía del personal médico del Hospital, cuyo director es desde el viernes el doctor Renny Cárdenas, representantes de los sindicatos de la salud, a quienes les ha pedido “se conviertan en contralores, porque no voy a permitir que en el Hospital Central se venda una aguja para los pacientes; en nuestra gestión tenemos que cuidar que no se cometan hechos irregulares”.
Aseguró que no buscará culpables, por cuanto “el pueblo sabe dónde están; quiero buscar soluciones”. En ese sentido, consideró que “el personal será el garante de que a ningún ciudadano que venga a solicitar un servicio de salud, dentro de las instalaciones del Hospital Central, se le cobre una puya para facilitarle un insumo médico que es para el servicio gratuito”.
Anunció que el lunes pidió al Consejo Federal de Gobierno recursos para la reparación del tomógrafo, para habilitar la Unidad de Radioterapia para los pacientes oncológicos y los cinco pabellones que no están operativos por falta de insumos, equipos y personal que se ha ido por los sueldos bajos, para lo cual advirtió: “No me han dejado un puya para aumentarles el sueldo, pero vamos a incluir en el próximo ejercicio fiscal la atención presupuestaria de la insuficiencia salarial de los profesionales de la salud”.
Sobre la comida de los pacientes y el depósito, declaró que hará una mancomunidad con miembros de la Iglesia Católica que han manifestado que quieren colaborar, e incluso la directiva del Hospital le está planteando que le den la administración del depósito y el comedor a algunas representantes, madres superioras, que “puedan ayudar a garantizar que no se desvíe la medicina y la comida que llega a donde se cocina el alimento de todos los pacientes”.
Informó que el personal cobrará la próxima semana, porque esta semana fue el cambio administrativo y no había recibido antes el ente porque quienes tenían que entregar tenían que hacer un informe de auditoría “que me permitiría decirle al Táchira cómo estoy recibiendo la salud”.
Advirtió que tiene ciento veinte días para presentar la auditoría administrativa porque no anda “en cacería de brujas ni persiguiendo a nadie, pero tengo la responsabilidad de que se haga justicia para los que perturbaron el desarrollo de la salud en el estado”.
Marina Sandoval Villamizar