Homero Duarte Corona
El hijo de Táriba, Jesús Enrique Colombo, vuelve a la Plaza Las Ventas de Madrid, cuna del toreo universal. Lo hace por séptima vez el diestro criollo, respaldado por una excelente campaña en suelo peruano y en la Feria Nuestra Señora de Regla, de Tovar, la “Sultana del Mocotíes”.
Con la capa, garapullos y la pañosa, el nacido en la “Perla del Torbes” tiene el corazón henchido de orgullo torero, quiere salir por la puerta grande en la emblemática plaza madrileña, sabedor que no ha tenido suerte en sus presentaciones ya con el doctorado como matador de toros.
Su padre, el exmatador de toros Jesús Colombo, es una especie de alfa y omega en la carrera profesional de Jesús Enrique, por donde va le sigue, siempre aportándole el consejo oportuno, y a fe que ha sido de gran valía para los éxitos que viene cosechando cada vez que se presenta en un redondel, en Venezuela y el exterior.
Previo a su presentación en la capital española, Jesús Enrique actuará en Quito, Ecuador, este 4 de octubre, para de allí saltar el gran charco y aterrizar en Las Ventas, donde estuvo cuatro veces como novillero; el año pasado que confirmó su alternativa, el 30 de mayo, y al día siguiente volvió a hacer el paseíllo allí mismo, y regresa el venidero 12 de octubre, para cerrar su temporada de 2019 en territorio ibérico.
Existe fe ciega de padre e hijo en su presencia en Madrid, se vislumbran cosas buenas después de sus éxitos en plazas “incaicas” y venezolanas, con la seguridad que el modesto pero carismático torero taribense va a armar la grande en Las Ventas, lo que le pudiera abrir muchas puertas para la temporada 2020.
De España, Jesús Enrique regresará a América, para corroborar sus triunfos en cosos peruanos, se presentará en la legendaria Plaza de Acho, de Lima, el 17 de noviembre, Feria del Señor de los Milagros.
De cara a la temporada 2020, el diestro tachirense ya tiene asegurada su presencia en la Feria Internacional de San Sebastián, en su tierra, y en la Feria del Sol de Mérida. Igualmente se anuncia su debut como matador de toros en suelo mexicano, territorio donde la afición sabe de toros y por ende exige mucho, tanto a los diestros nativos como a los extranjeros.
Este año, Jesús Enrique fue el triunfador en la Fiss 2019, y piensa repetir en el 2020, luego de la campaña de este año, una veintena de corridas lidiadas, el corte de una buena cantidad de orejas y la salida por la puerta grandes en cosos de América.