La competencia, que también incluyó danza y actuación, la llevaron a cabo la Organización Bolivariana Estudiantil y la Federación Venezolana de Educación Media en el Táchira
Por Jonathan Maldonado
Génesis Pineda y Ángel Rojas, residentes de San Antonio del Táchira, en el municipio Bolívar, unieron sus talentos musicales en un concurso estudiantil del estado Táchira que les permitió alzarse con el primer lugar, en la categoría de canto.
Pineda, con una voz que deleita hasta al más distraído, y Rojas, con sus destrezas en el cuatro, cautivaron al jurado del primer concurso musical de la Organización Bolivariana Estudiantil (OBE) y de la Federación Venezolana de Educación Media en el estado Táchira (Feveem).
La chica, estudiante de noveno en el Liceo Nacional Bolívar, y el joven, a punto de culminar el bachillerato en la misma institución, se fusionaron para participar en el concurso, una vez se enteraron a finales de enero.
En vista de que vivían en un municipio alejado de la ciudad capital, San Cristóbal, todo el material lo grabaron y lo enviaron mediante las plataformas digitales y redes sociales. La canción con la que se lanzaron fue Viajera del Río, del venezolano Manuel Yánez.
A Pineda y Rojas los une su paso por la Orquesta Sinfónica de la jurisdicción fronteriza. La joven, además de cantar, toca el violín y otros instrumentos, mientras que el chico se destaca en la flauta traversa y otros instrumentos, entre estos el cuatro.
Pineda sonríe a toda hora. Tiene una personalidad extrovertida, algo avasallante. Rojas, entretanto, es un poco más tímido y parco, pero igual de talentoso. «Estábamos muy ansiosos y tuvimos que esperar varias semanas para conocer los resultados», dijo.
«El canto lo he desempeñado toda la vida, mientras que en la orquesta he estado desde los cinco años», manifestó Pineda, en compañía de su madre y hermana menor.
La entrevista se desarrolló en la emisora Admirable Stereo 106.1. En ese espacio, ambos derrocharon talento. El muchacho estuvo en el amplio grupo que fue a Caracas para lograr el récord Guinness como la Orquesta más grande del mundo.
«Yo quisiera seguir aprendiendo más del canto y de distintas técnicas en el manejo del violín», resaltó Pineda, al tiempo que anhela llegar a un punto donde pueda compartir todas las experiencias vividas en el mundo musical.
Rojas es consciente del rol que juega la orquesta en su crecimiento. Sabe que el tiempo invertido durante más de cinco años en ella le ha garantizado alejarse del ocio.
Como está a punto de cerrar su ciclo con el bachillerato, no descarta la posibilidad de enlazar su carrera universitaria con la música; incluso sueña con una audición para el Conservatorio de Música Simón Bolívar, extensión Táchira.
Mensaje
Pineda, de 14 años, y Rojas, de 17, están centrados, saben lo que desean en un futuro cercano y, con esa convicción, les envían un mensaje a los adolescentes.
«Los invito a explorar nuevas áreas, a aprovechar muy bien el tiempo y a alejarse de todo lo que no les hace provecho», puntualizó el chico.
«Hay que aprender cualquier arte o disciplina, incursionar en el deporte, la universidad», agregó la chica, para luego agradecer el apoyo familiar que ha recibido, punto fundamental en cada uno de los logros obtenidos.