De más a menos fue el desempeño del representativo nacional de fútbol sub 20, luego de que perdiera por tercera vez consecutiva y se quedara fuera de la zona de clasificación para la Copa del Mundo Polonia 2019.
El seleccionado patrio olvidó su brújula, precisamente en la instancia decisiva del Campeonato Sudamericano de Fútbol Sub 20, realizado en Chile, y que otorgó cuatro boletos para la justa internacional copera, esa en la que hace dos años Venezuela gestó la hazaña de alcanzar el subcampeonato.
Venezuela cae ante Ecuador 3 por 0 y se queda sin cupo al Mundial
Luego del empate a 0 entre colombianos y uruguayos, la “Vinotinto” volvía a depender de sí misma para concretar sus aspiraciones mundialistas, más sin embargo, nuevamente tropezó con la roca de la dolorosa derrota y terminó consiguiendo otra caída más en el certamen Sudamericano, esta vez ante Ecuador por 3 tantos a 0.
Tras una exitosa y prometedora Primera Fase, en la que el cuadro nacional quedó primero, todo parecía color de rosa para Venezuela. Comenzó empatando con Uruguay a 1 en el debut del Hexagonal Final, después derrotó 2×0 a Brasil en su segunda presentación y se estableció en lo más alto de la tabla.
De allí en adelante vino una hecatombe para los muchachos dirigidos por Rafael Dudamel. Argentina les propinó el primer puñetazo goleándoles 3 a 0. Seguidamente, Colombia los dejó agonizando al vencerles por 2 a 0, y finalmente, Ecuador llegó para asestarles el golpe de gracia, apabullándoles 3 a 0.
Baldado de agua fría
Una vez conocido el empate a 0 entre Colombia y Uruguay, la ilusión se posó sobre el panorama venezolano, pues ya no tendría que esperar otros resultados sino ganarle a Ecuador así sea por la mínima.
Lastimosamente, a los 2 minutos de haber comenzado el encuentro la Vinotinto se topó con su primer obstáculo; recibió la primera diana del juego gracias a un penalti cobrado por el delantero meridional Leonardo Campana.
Un error que llegó porque Venezuela no salió enfocado en el compromiso. Le costó asumir que solo debían ganar y, contrariamente, reflejaron nerviosismo e imprecisiones en los primeros 15 minutos.
Poco a poco pareció ir tomando forma y propuso una que otra llegada de peligro, basándose más en tener el dominio del balón, pero sin la creación de muchas ocasiones ofensivas.
Al 31´, Campana volvió a vulnerar las redes bolivarianas, luego de pintarle la cara al portero Vinotinto, Carlos Olses, y el defensor y capitán del colectivo patrio, Cristhian Makoun.
Campana realizó una chilena en la cara del zaguero, y desde el mismo césped, evitando que le balón cayera, atléticamente remató colocado ante la salida del arquero, aumentando la ventaja y poniéndosela mucho más difícil a Venezuela.
Sobre el final, cuando la Vinotinto se resistía a aceptar su destino, tuvo que llegar Daniel Segura, desde el banco, y en su primera jugada, hacer gala de sus habilidades individuales para apuntillar a una moribunda selección nacional, justamente a los 90´ cumplidos.
Nada que reprochar
Hay que dejar en claro que no hay nada que reprocharle a este buen grupo de jugadores que se la jugó siempre toda en el Sudamericano, quienes sudaron la camiseta hasta el último minuto.
Quizás las raíces del fracaso estuvieron en la fatiga grupal, pues Dudamel poco rotó y le exigió el estado físico a sus jugadores en todos los partidos, guardándose los cambios para los últimos 5 minutos.
También podemos acusar la selectiva confianza del estratega venezolano en 15 piezas, aproximadamente, pues los titulares casi siempre fueron los mismos, e igual que los jugadores de recambio. Hubo mucho talento que se quedó en el banco y no vio ni un solo segundo, para tan siquiera mostrar lo que podía hacer.
De esta manera, en la Copa del Mundo polaca estarán presentes los seleccionados de Ecuador, Argentina, Uruguay y Colombia, mientras que Venezuela y Brasil se quedaron a las puertas de la misma.
Favio Hernández