El baloncesto tachirense se ha venido de más a menos y no es por causa de la pandemia del covid-19, sino que ha bajado el trabajo de los dirigentes, de las organizaciones que motivan la disciplina, con solo un reducido número de clubes que se mantienen en el tabloncillo.
Sin tocar la pandemia, del deporte de las cestas, con buenos numeritos, con jugadores y jugadoras de nivel, clubes bien organizados y dirigentes entregados a fomentar la disciplina en todo el territorio tachirense, no conocemos de resultados.
Esta falta de promoción del deporte, de sembrar el semillero en el básquet, mantiene en la soledad el tabloncillo del Gimnasio Cubierto Arminio Gutiérrez Castro, en La Concordia, instalación que se deteriora poco a poco, por esa misma falta de vida, de uso.
Para esta disciplina se viene a complicar su situación al presentarse el covid-19, que obliga a la paralización de todas las actividades en el mundo, y con mucha seguridad ya se dice que no se ve una salida a la presencia de este mal que causa daños irreparables.
El baloncesto cuenta con una moderna instalación, lujo que no se pueden dar otras asociaciones del país, pero no se le saca que provecho que debe rendir y de acuerdo a muchos datos, se observan algunos años en ese gran edificio.
Recordamos que el Gimnasio Cubierto fue remodelado para los Juegos Deportivos Nacionales del 2005 y es poca la acción que allí se presenta.
La nueva directiva de la Asociación de Baloncesto espera que este problema sea resuelto para preparar una tarea que permita lograr el rescate de la disciplina, darles oportunidad a los niños, y se debe implementar nuevamente un programa que lleve el básquet a los planteles de la región.
Se trata de objetivos que se pueden lograr contando en todo momento con el apoyo de padres y representantes, así como del Instituto del Deporte y la empresa privada, que en todo momento ha prestado su apoyo al desarrollo del deporte en nuestra entidad, en especial al baloncesto.
Gustavo Carrillo