Rancagua, Chile – AFP – Discretos para concretar negocios en un mercado voraz, cientos de ‘cazatalentos’ deplegaron sus redes en el Sudamericano Sub-20 de Chile. La misión: identificar a los futbolistas que hasta ahora quedaron fuera del radar de los clubes poderosos.
Llegaron a Chile cerca de 300 ‘scout’, la mayoría partió de Chile tras la primera ronda con la sensación que había poco por descubrir, en un torneo que fue escenario de clases magistrales protagonizadas por Diego Maradona, el uruguayo Enzo Francescoli y el colombiano Carlos Valderrama. Más recientemente, Lionel Messi y Neymar mantuvieron la tradición.
“Venimos a buscar lo mejor posible, sólo podemos llevar jugadores de nivel si los otros están distraídos, somos clubes portugueses y no tenemos plata para comprar”, dijo a la AFP un ‘buscador’ de un equipo de Portugal que prefirió resguardar su identidad.
La tribuna principal del estadio El Teniente de Rancagua, donde Argentina, Brasil, Colombia, Ecuador, Uruguay y Venezuela disputan el hexagonal final, se transformó en la oficina de decenas de estos emisarios.
Es un trabajo donde la discreción y la anticipación marcan la diferencia, en especial en un torneo “flojo”, así definen fuera de micrófono al campeonato y a su trabajo, que prosigue en ocasiones en la puerta de hoteles donde concentran los seleccionados.
En Curicó -una de las sedes de la primera fase- “me tuve que poner bravo con uno de estos (cazatalentos). Estaba constantemente en el hotel, son tan desfachatados que se acercan a los futbolistas como si fueran mercancías”, comentó a la AFP el entrenador de Ecuador, Jorge Célico.
El argentino, coordinador de las selecciones juveniles de Ecuador, aseguró que parte de su tarea es mantener tranquilos a los futbolistas ante tanto bombardeo de ofertas.
“Lo que hago es explicarle a los chicos que no se dejen tratar como objetos, que son seres humanos. Tomando un café les hablo de la roña y porquería que hay alrededor del fútbol y que es importante que escuchen a su gente de confianza”, comentó el timonel de un equipo ecuatoriano que brilló en la fase inicial del torneo y lucha por uno de los cuatro cupos a Polonia-2019 que están en juego.
Un mercado impaciente
Si el contrato firmado a los 11 años por el brasileño Rodrygo con una multinacional de calzado deportivo sorprendió al mundo, en los últimos años se volvieron regla los millonarios fichajes de futbolistas adolescentes.
“Los que son muy buenos fichan con grandes a los 15 o 16 años. Rodrygo es un buen jugador pero su fichaje por el Real Madrid de más de 40 millones solo se explica por la locura del mercado”, comentó el emisario portugués mientras observaba uno de los duelos de la ‘canarinha’.
Dos goles ante Venezuela en la primera fase pusieron a Rodrygo en los titulares. El Real Madrid –que recibirá al jugador formado en el Santos en los próximos meses- se frotaba las manos. Pero la ‘verdeamarela’ mostró poco en este torneo y a tres fechas del final ocupa la última posición y peligra su clasificación al Mundial de Polonia.
Brasil llegó a Chile sin su máxima figura Sub-20, Vinicius Junior. El delantero del Real Madrid debió quedarse con su club, una situación similar a la del colombiano Juan Camilo Hernández, jugador del Huesca de España.
En campo figuras con el uruguayo Nicolás Schiapaccasse, cuya ficha pertenece al Atlético de Madrid, los argentinos Maximiliano Romero (PSV Eindhoven) y Facundo Colidio del Inter de Milan y Christian Makoun, capitán de Venezuela y jugador de Juventus de Italia, sacan la cara por los ‘repatriados’ en un torneo que pese a altos y bajos mantiene su lugar como cantera de talentos.
Negocios cerrados
Pese a estar lejos del brillo alcanzado en otros Sudamericanos Sub-20, como el de 2011 cuando Neymar maravilló al mundo con sus gambetas y goles de videojuego, el torneo de Chile movió el mercado de pases.
El lateral brasileño Emerson pasó del Atlético Mineiro al fútbol de España con un acuerdo entre Barcelona FC y Betis, el uruguayo Nicolás Schiappacasse fue cedido por el Atlético de Madrid al Parma.
En la región, destaca el fichaje del arquero venezolano Carlos Olses que pasó a préstamo con opción a compra desde su país a Racing de Avellaneda y el de su compatriota el delantero de Estudiantes de Mérida Jesús Vargas que jugará en Gimnasia La Plata.
“En Sudamérica está el talento, tenemos una genética inigualable”, reflexionó Célico que durante este Sudamericano Sub-20 observó cómo dos de sus figuras Gonzalo Plata y Moisés Ramírez fueron fichados por Sporting Lisboa y Real Sociedad de España, respectivamente.
“Tenemos el talento y eso no se compra, no tiene precio”, concluyó.