Homero Duarte Corona
CARLOS ALVIAREZ SARMIENTO, ícono de las transmisiones de ciclismo del Táchira y el país, el primer narrador que se subió arriba de una escotilla, primero como voz comercial, en la primera edición de la Vuelta al Táchira en Bicicleta-una vieja camioneta de la empresa Cadafe, donde él trabajaba-, motivo de inspiración para convertirse con el correr de los años en un emblema de la radiodifusión del estado, el país y allende de las fronteras patrias. CÓMO BIEN lo acotó Iván Alirio Ramírez, Carlos Alviarez es un maestro de maestros dentro de la radio deportiva del Táchira, especialmente a nivel de ciclismo. “CARLOS ALVIAREZ me trata como un hijo más, tanto a nivel de la radio como en lo personal, algo que me hace sentir orgulloso”, sentenció Iván Alirio. QUIENES HAN seguido el Giro Andino desde su nacimiento en 1966, saben de todo el recorrido que tiene “El Viejo” Carlos Alviarez, como se le conoce entre sus colegas; en su dilatada carrera como locutor y periodista de la vieja guardia, desde la extinta Asociación Venezolana de Periodistas (AVP), fundador del Colegio Nacional de Periodistas (CNP) y miembro del Círculo de Locutores y Periodistas Deportivos del Táchira, entre otros gremios del país. A NIVEL profesional, en su juventud, fue un trotamundo, viajó por todo el universo; tiene en su haber él cubrimiento de varias ediciones de Juegos Olímpicos, entre los más destacados Múnich, Alemania y Canadá, también varios Campeonatos Mundiales de Fútbol: México 1970, Alemania 1974 y Argentina 1978, entre otros; Series Mundiales de Béisbol; Mundiales de Ciclismo; Tour de Francia, Giro de Italia y Vuelta a España; Vueltas a Colombia, Clásicos RCN e infinidad de eventos deportivos de otra índole, entre los tantos que ha cubierto este hombre de la comunicación social orgullo del Táchira y el país.
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CÓMO NARRADOR de ciclismo estuvo inmiscuido en más de veinte ediciones de la Vuelta al Táchira en Bicicleta, compartiendo micrófono junto a grandes hombres de la narración deportiva de Colombia, entre los más de mayor abolengo para la época, Carlos Arturo Rueda C., Alberto Piedrahita Pacheco, José Antonio Chourio y Julio Arrastría Brica, llamado “El Viejo Macanudo”. EN EL Táchira y Venezuela tuvo como compañeros de transmisión, en primera instancia a Guillermo “Guillo” Villamizar en el rol de comentarista, que por varios años fue la yunta de oro en el Ecomóvil Número Uno de Ecos del Torbes; después vinieron otros, entre los más destacados Luís Alfonso Ramírez, Nelson Augusto Buitrago, Manuel Dávila Mogollón y su hermano Jairo, Alfonso Saer, Leonardo Berti Urdaneta, Jesús María Ortiz y Rafael Davoín. NO ES tarea sencilla recordar tantos comunicadores que estuvieron al lado de Carlos Alviarez Sarmiento mientras llevó la batuta en el Ecomóvil Número Uno, se quedan muchos sin nombrar pero la mente no da para tanto, nuestras disculpas. IVÁN ALIRIO Ramírez, quien después del “Guillo” Villamizar es de los pocos comentaristas de ciclismo que compartió micrófono con el maestro Carlos Alvíarez, privilegio del cual se siente orgulloso el docente y hombre de la radio, según confesión al columnista, pues el nacido en Lobatera es toda una institución dentro de la radio deportiva del Táchira. RECORDÓ IVÁN que Carlos Alvíarez fue jefe de prensa de los Mundiales de Ciclismo de 1977 en San Cristóbal, y junto al periodista Ramsés Díaz León, fue uno de los pilares fundamentales para que el magno evento del pedal de carácter universal se celebrara en la capital tachirense. PERO NO sólo Carlos Alvíarez es narrador de ciclismo, también se destacó en fútbol, basquetbol y béisbol, sin duda un polifacético hombre de la radio deportiva del Táchira. SE RESISTE a cerrar el micrófono, a sus 80 años esta insignia de la radio venezolana, labora para una televisora comunitaria en Lobatera y Michelena; y en Ecos del Torbes, despide el año que se va y recibe el que llega, una vieja tradición de la cual tomó el relevo luego de la desaparición física de José de Jesús Mora Figueroa.
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EN LO PERSONAL, Carlos Alvíarez Sarmiento procreó dos hijos al lado de su esposa Aura Rosa Porras de Alviarez, docente de toda la vida en Lobatera, Aura Magaly, licenciada en Comunicación Social de la Universidad de los Andes y Carlos Miguel, locutor egresado de la Universidad Central de Venezuela, quienes al igual que su progenitor se inclinaron por los medios escritos y hablados. Magaly tiene dos hijos, nietos de Carlos Alviarez, Marián, quien es sicólogo y vive en Miami y Carlos Santiago Contreras, abogado, residenciado en Nueva York. La adoración del “viejo” Carlos, su razón de ser, su biznieto Juan Andrés Ramírez Alviarez, quien tiene 10 años y está con Marián en Estados Unidos.
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AHORA MISMO CARLOS Alviarez pasa por un momento nada cómodo en su vida, un problema de salud lo tiene recluido en el hospital Central, de San Cristóbal, esperando su pronta recuperación. EN ESTE interminable hombre de medios, el Táchira y el país tienen un baluarte, ejemplo vivo para quienes ahora se inician en estos avatares de la comunicación social. (HDC)