El poder ofensivo, uno de los elementos fundamentales en el juego del béisbol, no acompaño a Cardenales de Lara en su periplo por la Serie del Caribe, hasta el punto de fracasar en el compromiso donde disputó el título frente a Toros de República Dominicana.
Gustavo Carrillo
Los problemas que debió superar la novena campeona de Venezuela, con la documentación de sus peloteros, obligó a la gerencia a convocar hasta quince jugadores para conformar el team que viajó a participar en el evento.
Ganó cinco compromisos y perdió dos. La ofensiva no aportó lo esperado por el cuerpo técnico. Los resultados en cada encuentro dejaban ver la debilidad de la ofensiva, ante equipos que supieron manejar el pitcheo.
Cardenales de Lara pasó apuros para vencer a su primer enemigo, Vaqueros de Montería, por Colombia. El conjunto del hermano país dominada a los criollos con pizarra de 4×0, hasta el quinto tramo, y en el sexto, la ofensiva del Cardenales de Lara reaccionó, anotando seis carreras, suficientes para conquistar el triunfo.
Se impuso a Dominicana con pizarra de 4×3, en extraining; derrotó a Panamá 2×0, y en la semifinal a México 1×0. Un total de trece carreras en cuatro encuentros, un promedio de tres carreras por juego, y así es difícil ganar en el béisbol.
El pitcheo, de acuerdo con los numeritos, cumplió un buen trabajo, pero no se pudo concretar un buen resultado al no contar con la producción ofensiva, quedando un buen número de corredores anclados en las bases.
Luis Ugueto, mánager del equipo campeón venezolano, junto con la directiva del conjunto, trató de solventar los problemas que se presentaron con algunos peloteros por el visado y hasta quince jugadores se llamaron para suplir las vacantes, pero igual se observó la debilidad del conjunto en cada compromiso. El último título ganado por Venezuela ocurrió en la Serie del caribe del 2009, con Tigres de Aragua.
Luego de derrotar a México con pizarra de 1×0 en el penúltimo compromiso, dejó el camino abierto para jugar la final con República Dominicana, conjunto que en la jornada superó a Puerto Rico, dejando en el camino a los anfitriones de esta cita peloteril.
En la edición de la Serie del Caribe que acaba de finalizar, el conjunto venezolano se presentó con uno de los mejores cuerpos de lanzadores, pero en el béisbol todos los departamentos van de la mano, defensiva, ofensiva y pitcheo, y Cardenales de Lara no pudo presentar el poder ofensivo que exhibió en algunos compromisos de la final criolla, donde igualmente pasó apuros para ganar. Los Toros de República Dominicana supieron aprovechar los momentos precisos y con cinco carreras en los primeros episodios, descontrolaron a sus rivales, que trataron de reaccionar, pero fue demasiado tarde, al lograr una rayita en el sexto y dos en el séptimo.
Ahora, buen número de peloteros que formaron parte de la delegación de Venezuela en la Serie del Caribe tienen invitación para vestir el uniforme de la selección en el repechaje para la escogencia de los dos equipos a los Juegos Olímpicos de Tokio, escogencia que se va a desarrollar en la segunda quincena de febrero, en Texas. (GC)