Un esloveno por primera vez en lo más alto del podio en París: Tadej Pogacar conquistó este domingo su primer Tour de Francia tras la disputa de la 21ª y última etapa, ganada al esprint por el irlandés Sam Bennett.
En la víspera de celebrar su 22º aniversario, Pogacar se convierte en el segundo ganador más joven de la historia del Tour, sólo por detrás de Henri Cornet, que logró con 19 años en 1904 y el primero en hacerlo en el año de su debut desde 1983 (Laurent Fignon).
“Estar aquí en París, en el primer escalón del podio es increíble. Fueron tres semanas en las carreteras francesas absolutamente memorables”, aseguró Pogacar nada mas ser investido de amarillo.
El tradicional paseo por los Campos Elíseos, que suele tener más de fiesta y celebración que de competición, no cambió en nada las clasificaciones de la víspera, tras la exhibición de Pogacar en la ‘crono’ con final en la Planche de Belles Filles.
Tras arrancar el pasado 29 de agosto en Niza y después de más de 3.400 km de intenso esfuerzo, el pelotón llegó este domingo a París para una homenaje reservado a los 146 supervivientes (de los 176 que comenzaron) y, sobre todo, una gran fiesta a los elegidos al podio.
General, jóvenes y montaña
Y en la ceremonia de premiación, el protagonismo fue casi único para Pogacar. El joven prodigio esloveno, de 21 años, subió para vestirse de amarillo como ganador de la carrera, pero también lo hizo para ponerse el maillot blanco de la clasificación de los jóvenes y para recibir el jersey de lunares rojo como mejor escalador.
A Pogacar, que sucede en el palmarés al colombiano Egan Bernal, sólo se le escapó el maillot verde, el de la clasificación por puntos, que fue para el irlandés Sam Bennett.
El único ciclista en toda la historia en ganar todas las clasificaciones individuales fue Eddy Merckxx en 1969, que se impuso en la general, los puntos, la montaña y la combinada. La de jóvenes no existía aún, pero la leyenda belga logró su primer triunfo en París con 24 años recién cumplidos, lo que actualmente también le habría permitido vestir el maillot blanco.
En el podio, acompañaron a Pogacar su compatriota Primoz Roglic (que perdió la carrera el sábado tras vestir once días de amarillo) y el australiano Richie Porte.
“Evidentemente hubiese querido ganar, pero estoy muy orgulloso de mi trabajo y el de todo mi equipo. Felicidades a Tadej, simplemente fue el mejor”, declaró con una inusual sonrisa Roglic tras bajarse del podio, en el que le acompañó su hijo.
Para Porte, uno de los ciclistas con más mala suerte del pelotón, subir al tercer escalón del podio en París es “un sueño absoluto” tras lograrlo por primera vez en 10 participaciones. A sus 35 años, el australiano guarda un lugar especial en su casa para colgar la foto de este domingo. “Significa tanto para un ciclista…”, aseguró.
Movistar, mejor equipo
También subió al podio, y ya es una costumbre, el Movistar, vencedor de la clasificación por equipos. Es la quinta ocasión que la formación navarra lo consigue en las últimas seis ediciones, las tres últimas de manera consecutiva.
En la lucha por la prestigiosa victoria en París, Bennett se impuso en la llegada final al actual campeón del mundo, el danés Mads Pedersen, y al eslovaco Peter Sagan, logrando su segunda victoria parcial y demostrando ser el esprínter más en forma en este Tour.
“¡Es indescriptible! El maillot verde, los Campos Elíseos… He sufrido tanto en la montaña para llegar a este momento”, declaró el vencedor de la etapa.
En esta última jornada, los ciclistas también quisieron demostrar que son sensibles a los problemas sociales y en la salida lucieron mascarillas con el mensaje ‘No al racismo’. “Vivimos en una burbuja y no somos conscientes realmente de lo que ocurre en el exterior, por lo que hemos decidido en una conversación entre todos mostrar que queremos un mundo mejor”, explicó el veterano italiano Matteo Trentin.
El Tour-2020 echó el cierre con el descubrimiento de Pogacar para el aficionado ciclista, aunque el gran ganador fue la propia carrera. “El llegar a París es ya una victoria” en tiempos de pandemia, se felicitó su director Christian Prudhomme.
AFP