La Gimnasia prepara el semillero sobre el tapete

Gustavo Carrillo

---

El trabajo de la gimnasia se ha visto reducido al mínimo y solo se cumplen programas de ejercicios preparados por los entrenadores a distancia, esperando que la situación con la presencia del COVID-19 se pueda superar.

Una disciplina exigente. Requiere de la entrega total del atleta en combinación con su entrenador para alcanzar  casi a la perfección los ejercicios, pero siempre se deben corregir aquellos detalles que suelen presentarse en la tarea.

La disciplina en el Táchira se viene practicando desde hace unos cuantos años atrás y podría decirse que toma impulso en la década del 70, para luego llegar con mayor impulso en el marco de los Juegos Deportivos Nacionales del año 78, que tienen como sede las instalaciones en nuestra entidad. Para esa importante cita  utilizan el tapete colocado  en el Gimnasio Cubierto, Arminio Gutiérrez Castro y el Complejo Deportivo Juan Maldonado en La Concordia.

Hoy día, este bonito deporte de figuras y danzas tiene un extraordinario escenario el Pabellón Alba Jáuregui en la parte alta de la ciudad, concretamente en un sector Pueblo Nuevo,  Una instalación moderna con todas las comodidades, pero ya requiere de la atención por parte de los organismos correspondientes, señala Henry Castillo, presidente de la asociación que rige la disciplina en la región.

En estos momentos no se cumple el plan de entrenamientos en la preparación de los atletas con miras a los Juegos Nacionales, pero uno a uno trabaja en sus casas con el programa que han entregado los entrenadores permitiendo mantener la parte física.

Tres años al frente de la directiva cumple el profesor Henry Castillo esperando para ver que ocurre en el 2021 cuando se cumple su tiempo en el cargo y se convoque a un proceso de elecciones, donde los directivos de clubes se encargan de elegir un nuevo equipo de trabajo, todo avalado por el Instituto del Deporte.

De acuerdo a sus números, se reúnen entre 60 y 80  atletas trabajando diariamente el masculino  en diferentes aparatos, manos libres, anillas, barra fija, paralelas y potros con arzones mientras que el femenino lo hace en manos libres, saltos, barras asimétricas y riel.

Tienen un  intenso programa que se planificó con miras a los las competencias de octubre y noviembre pero debido a la postergación han cambiado de planes a ver que se puede realizar con este cambio, y  esperando  una pronta solución al problema del COVID-19.

En la cita nacional se involucran las competencias en la modalidad de trampolinismo, gimnasia rítmica y artística. Táchira no acudirá con atletas en todas ellas, y su número de asistentes se reduce a unos tres atletas.

Habla del trabajo diario de entrenamientos de los gimnastas. Esa labor se cumple  en horario que se inicia a partir de las 2 y 30 hasta las 6 de la de la tarde, con programas previstos por los preparadores. Acuden atletas en formación deportiva y de Alta Competencia. Alumnos de siete clubes asisten  a realizar  el trabajo de entrenamientos para luego mostrar su desarrollo en los eventos que se programan a nivel regional.

Moderno Escenario. El profesor Henry Castillo reconoce que la gimnasia del Táchira cuenta con un moderno escenario construido en el 2005 para albergar allí las competencias de los Juegos Nacionales Juveniles, y de ahí a esta fecha han transcurrido 15 años.

Con el paso de los años, el tiempo es inclemente y la instalación sufre de un diario deterioro por lo que es necesario que el organismo encargado de mantener esos escenarios programe un maquillaje general para el Pabellón de Gimnasia, recuperando los espacios que mayor daño han sufrido, como son el tapete y la fosa de saltos.

Se debe trabajar en otros detalles, dice el Profesor Castillo y señala la necesidad de colocar láminas a los costados de la instalación para evitar que el agua de lluvia se filtre a los espacios internos donde se encuentran todos los aparatos de trabajo, así como el propio tapete, en proceso de deterioro.

Finalmente, el presidente de Aso-Gimnasia anuncia que se va a trabajar con una nueva modalidad, llamada Farco, inicialmente en condición de exhibición y tratando de programarlo para los días sábado por cuanto se trata de acrobacias y pueden aprovechar el uso de los aparatos y las colchonetas para realizar los saltos ornamentales.

Henry Castillo, un exatleta de la gimnasia, decidió quedarse en ese deporte ahora como entrenador y directivo para tratar de cumplir un trabajo, contando con el apoyo de otros directivos, de padres y representantes que permitan mantener viva esta exigente disciplina.