Rosario, Argentina – AFP.
Lionel Messi fue la gran figura el sábado en el partido homenaje a Maximiliano Rodríguez, leyenda de Newell’s Old Boys y exmiembro de la selección argentina, en una fiesta celebrada en Rosario, ciudad natal de ambos, y presenciada por más de 40.000 espectadores.
«Hoy es un día hermoso para estar, por la gente que vino, contento por acompañar a la ‘Fiera’ en un día muy importante para él. Hacía mucho tiempo que no pasaba un cumpleaños en Rosario con mi familia con mis amigos, y es el primero siendo campeón del mundo», expresó Messi, que llegó al estadio directamente con los botines en las manos.
«Siempre es lindo venir a Rosario, aquí siempre fueron cariñosos conmigo. Hace poco conseguimos lo que toda la Argentina quería, con unión, con esfuerzo, con sacrificio”, agregó en declaraciones a Star+ el capitán del seleccionado argentino campeón del mundo en Catar-2022 y que este sábado cumplió 36 años.
«Esto no para, si bien es especial y único lo que logramos de ser campeones del mundo. Es el sueño de todo futbolista. En toda mi carrera había conseguido cosas importantes, pero van quedando atrás y uno piensa más en lo que viene que en lo que hiciste, pero cuando me toque dejar el fútbol voy a recordar y disfrutar más de todo lo conseguido», finalizó.
Aunque nunca jugó para un equipo argentino como profesional, Messi comenzó su extraordinaria carrera como futbolista en las divisiones formativas de Newell’s y a los 12 años emigró a España, donde se incorporó a La Masía, del Barcelona.
Este sábado, Messi abrió la cuenta del partido entre Newell’s y la selección argentina con uno de sus fantásticos tiros libres a los 4 minutos, al ángulo izquierdo del paraguayo Justo Villar, y luego anotó dos goles más, mientras la hinchada de Newell’s le cantaba «esta es tu casa, podés volver».
Messi disputó solamente los primeros 45 minutos de un encuentro en el que también tomaron parte sus compañeros en la selección campeona mundial Leandro Paredes, Ángel Di María y el entrenador Lionel Scaloni.
La hinchada de Newell’s incluso ovacionó a Di María, con pasado en el archirrival Rosario Central, del que es ídolo.
También estuvieron Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol, que se dio el lujo de jugar unos minutos con la camiseta de la selección albiceleste, y Claudio Tapia, mandamás de la Asociación del Fútbol Argentina (AFA).
Entre los numerosos participantes del encuentro estuvieron David Trezeguet, campeón del mundo con Francia en 1998, y otros históricos como Gabriel Batistuta, Ariel Ortega y Gerardo ‘Tata’ Martino, otro icono de Newell’s.
Uno de los momentos más emotivos de la noche se produjo cuando Benjamín Agüero, hijo del ‘Kun’ Sergio Agüero, le regaló a Maxi Rodríguez una camiseta con el número 10 que su abuelo, el legendario Diego Maradona, vistió cuando jugó en Newell’s en 1993.
Maxi Rodríguez, que jugaba como extremo o mediapunta, tuvo una extensa carrera de más de dos décadas, en las que militó en Espanyol de Barcelona (2002-2005), Atlético de Madrid (2005-2009), el Liverpool (2010-2012) y Peñarol uruguayo (2017-2019).
Pero, fiel a los colores rojinegros, Rodríguez empezó su carrera y siempre volvió a Newell’s, en el que debutó en 1999 y donde se retiró en la temporada 2021, con el que ganó un torneo Final en la temporada 2013, y también celebró una Copa de la Liga con Liverpool (2012) y otros cinco títulos locales con Peñarol.
Rodríguez también se lució en la selección argentina, con la que fue subcampeón mundial en Brasil-2014 y a la que defendió por 13 años, con 54 partidos jugados y 15 goles anotados, el más recordado de ellos el que marcó para vencer 2-1 en el alargue a México en los octavos de final del Mundial de Alemania-2006.