El Banco Central comenzó a regular el precio al que los bancos pueden vender los dólares en efectivo en su poder. Analistas consideran que la medida puede ampliar la brecha entre el tipo de cambio oficial y el paralelo
En medio de un tipo de cambio bajo presión, el Banco Central de Venezuela se alejó del libre mercado y comenzó a regular el precio al que los bancos pueden vender sus dólares en efectivo.
Cada semana el Banco Central reparte a los bancos dólares en efectivo al precio que considera conveniente, esta semana a 4,54 bolívares por dólar. La regulación indica que hasta tanto los bancos no vendan todos estos dólares a 4,54 bolívares, no pueden vender dólares en efectivo en sus mesas de cambio a un precio superior.
Como los bancos no pueden vender dólares en la mesa de cambio a un precio superior al fijado por el Banco Central -hasta tanto no se desprendan de los dólares que les fueron adjudicados- es probable que esto afecte el precio al que compran dólares en efectivo a sus clientes.
“Si pones una restricción al precio al que puedes vender, afectas el precio al que estás dispuesto a comprar”, dice un banquero.
Tesoreros consideran que lo que busca el Banco Central es lograr que el tipo de cambio oficial, que todos los días surge del promedio ponderado de las transacciones en las mesas de cambio de los bancos (conocido como SMC), no tenga volatilidad.
La estrategia del Banco Central consiste en que, como las empresas y los comercios utilizan al dólar como parámetro para calcular costos, la estabilidad del tipo de cambio ayuda a desacelerar la inflación.
Junto a la regulación el Banco Central ha hecho saber a los bancos que deben cooperar en mantener la estabilidad del tipo de cambio.
La semana pasada, los bancos recibieron un mensaje directo donde se les indicó que “lo programado y la oferta de divisas están en función de preservar la estabilidad cambiaria y procurar la reducción de la inflación. Siendo así, seguir actuado bajo premisas erróneas que buscan alentar variaciones alcistas por supuesta expectativa de subida abrupta del gasto fiscal, es una guía falsa”.
El paralelo
Mientras el precio del dólar oficial puede verse afectado por la regulación, el precio del dólar en el mercado paralelo se mueve libremente y aumenta sin dificultad a medida que el Gobierno eleva el gasto e inyecta bolívares en la economía.
Analistas no descartan que pueda ampliarse la brecha entre el tipo de cambio oficial y el paralelo, algo que aumentaría las distorsiones en el mercado cambiario.
Síntesis Financiera explica en su informe El Tesorero que “la regulación del precio de la divisa en efectivo en ausencia de una moderación de la expansión monetaria, puede llevar a la ampliación de la brecha entre el tipo de cambio paralelo y el promedio SMC reportado diariamente por el Banco Central”.
“Si el Banco Central continúa vendiendo las divisas de intervención por debajo del precio del mercado paralelo, esa brecha se ampliará aún más”, dice El Tesorero.
La semana pasada, el precio del dólar en el mercado paralelo aumentó 10%, mientras que el tipo de cambio oficial se elevó 1,4%.
La ampliación
El Banco Central busca aumentar el efecto en el mercado de los dólares en efectivo que inyecta cada semana. Para lograrlo, ordenó a los bancos extender la oferta de estos dólares a la mayoría de sus clientes mediante un sistema que deberá estar listo en treinta días.
Los bancos tendrán que “informar a sus clientes a través de cualquier medio de comunicación y de las plataformas digitales (páginas web, redes sociales, banca electrónica, entre otras)” el procedimiento para comprar los dólares y las agencias donde podrán hacerlo.
“El Banco Central busca frenar el alza del dólar en efectivo en todos los segmentos del mercado formal, al expandir el radio de influencia del precio que fija en la intervención. Si logra su cometido podría alcanzar y sostener su tasa de cambio objetivo con menores niveles de intervención”, explica El Tesorero.
Reservas en declive
Para intervenir en el mercado cambiario el Banco Central necesita un tanque de dólares que le permita colocar cada semana un monto relevante de billetes verdinegros, pero las reservas internacionales están a la baja.
Al cierre del 19 de noviembre, el Banco Central reporta que las reservas internacionales se ubican en 10.982 millones de dólares, pero esta cifra incluye 5.100 millones de Derechos Especiales de Giro del Fondo Monetario que no están disponibles porque el FMI aún no ha decidido sobre la legitimidad del gobierno de Nicolás Maduro.
Además, incluye 1.500 millones de dólares en barras de oro que están en litigio con el Banco de Inglaterra y posición en oro que sí está disponible pero no es líquida y no podría ser utilizada de inmediato para intervenir en el mercado cambiario.
José Guerra, exgerente del Banco Central y diputado de la Asamblea Nacional elegida en 2015, calcula que actualmente la porción líquida de las reservas internacionales es de 1.700 millones de dólares.
Este año el monto de las reservas, al obviar los Derechos Especiales de Giro del FMI, ha caído en 485 millones de dólares.