Por decisión presidencial, desde el miércoles pasado, y luego en las semanas calificadas de flexibles en medio de la pandemia del coronavirus, vuelven a estar en actividad las salas de teatro y de cines, locales de los cuales se ausentaron unos diez millones de personas, en cumplimiento de la cuarentena, que ya va para un año.
Cines Unidos fue la cadena de salas de exhibición que anunció la reanudación de sus funciones bajo el cumplimiento de estrictas medidas de bioseguridad, empezando por solo recibir el 30 % de su aforo, el uso obligatorio de la mascarilla y el distanciamiento entre las butacas a ocuparse.
Igualmente, señalaron los empresarios que es mejor adquirir los tickets de entrada por Internet y de esa manera evitar la compra directa en taquilla, que de ser así se tiene que establecer el distanciamiento respectivo, de por lo menos metro y medio.
Para la gente del teatro, esta medida les ha caído como anillo al dedo, pues estaban sin trabajar por lo menos diez meses, acusando una situación económica muy difícil, pero que ahora esperan aliviar poco a poco, hasta que todo llegue a su calma normal, como se espera cuando se logre inmunizar a la población.
Lo que se desconoce es el precio de las entradas, pues al no poder cubrir ni la mitad de butacas, las mismas tendrían que ubicarse acorde con los gastos de mantenimiento de estas salas, que se han convertido en refugio del entretenimiento para una población que de manera obligatoria tiene que mantenerse en casa, por lo menos en cumplimiento de las semanas radicales impuestas para evitar el mortal contagio del coronavirus.
En San Cristóbal, Cines Unidos se mantiene en el centro comercial Sambil, que estará dando a conocer su cartelera cinematográfica.
Víctor Matos