Un grupo de transeúntes apuraba el paso este lunes 24 de junio en el puente internacional Simón Bolívar, para escaparse del sol abrasador de la tarde, típico de frontera.
A la par, decenas de carros atravesaban ambos carriles del puente más emblemático entre Táchira con Norte de Santander. El movimiento es constante y fluido.
Algunos peatones optaban por paraguas para protegerse del inclemente «catire». Las fuertes ventiscas hacían incómodo mantener el paraguas abierto. El puente está activo por 15 horas, al igual que el Francisco de Paula Santander y el Unión.
Son 300 metros de tramo binacional que conectan a San Antonio del Táchira con La Parada. Solo con dirección a Colombia, cruzan cada 10 minutos 160 vehículos.
El reclamo más vigente en torno a los puentes, se centra en que estén abiertos las 24 horas. El Atanasio Girardot es el único que cierra a la medianoche.
Jonathan Maldonado