Frontera
EDICIÓN FRONTERA | El efectivo en la frontera es en “pesitos”
29 de agosto de 2019
Por Favio Hernández
En varios lugares de Venezuela, el pueblo ha optado por la preferencia hacia divisas extranjeras, como mecanismo de pago ante las diferentes transacciones económicas que se realizan, tal es el caso de la frontera tachirense, en donde el peso colombiano predomina ante la moneda local, el bolívar.
Desde hace un par de años, los municipios Bolívar y Pedro María Ureña fueron las primeras regiones del estado Táchira en donde la población comenzó a transar con pesos, dejando a un lado al bolívar, aunque para ese tiempo aún lo recibían.
Posteriormente, con el transcurrir de los meses, frente a la galopante inflación y evidente pérdida de solidez de la moneda venezolana, el peso terminó por destronar al bolívar, inclusive llegando al extremo de que la moneda local ya no se recibe en dichas regiones.
Así lo reconoció el alcalde del municipio Pedro María Ureña, Jhon Carrillo, quien no se hizo de la vista gorda ante la evidente realidad que hoy día impera a lo largo y ancho del estado Táchira y, en especial, en el sector frontera.
“Es una realidad que el peso sustituyó al bolívar, debido a los problemas de solvencia que nuestra moneda presenta. El comercio de la frontera prefiere vender en pesos o en dólares, en vez de bolívares, pues con las otras divisas no tendrán problemas de devaluación a la hora de reponer su respectiva mercancía”, comentó el burgomaestre ureñense.
Del mismo modo, Carrillo explicó que los comerciantes tienen que traer sus productos desde Colombia, por lo que allá deben efectuar pagos en pesos y por ende, al vender en bolívares tendrían pérdidas a la hora de realizar el cambio de moneda, además de que en el “vecino país no están recibiendo el bolívar”.
Malas políticas económicas
“La necesidad de solvencia económica fue lo que llevó a que el venezolano se inclinara por vender en monedas extrajeras, en vez de bolívares. Todo esto es producto de la inflación y de las malas políticas económicas que esta revolución ha venido implementando durante todos estos 21 años”, comentó Jairo Ortiz, habitante del municipio Pedro María Ureña.
Ortiz continuó opinando que “el pueblo está obligado a tener pesos en sus cartera”, ya que el bolívar no sirve para nada, argumentando que, si es aceptado en algunos lugares “lo van a recibir carísimo, por mucho menos del valor establecido por el Gobierno y las casas de compraventa de divisas”.
Una realidad en toda la entidad
Esta práctica se expandió hacia los demás municipios del estado, incluso a la región zuliana. Por la cercanía a la frontera colombiana, las entidades del Táchira y Zulia tomaron al peso como moneda para transacciones comerciales y económicas.
El efectivo en bolívares ya no es tan utilizado ni recibido en la región metropolitana tachirense y, claramente, en locales comerciales y ventas informales callejeras anuncian el valor de sus productos en pesos.
Ya, poco a poco, las zonas metropolitana, sur y montaña del estado Táchira van adoptando el mismo mecanismo económico fronterizo, “y si no es en pesos, entonces es en dólares”, tal como lo dijo Ortiz.
De hecho, en los estados del centro y oriente del país, la economía y el comercio se manejan en dólares y euros, reflejando así la poca aceptación del bolívar en toda la nación.